El fondo sigue siendo positivo
Termina el primer trimestre y es momento de hacer balance. Un vistazo rápido a la evolución de las Bolsas en las últimas semanas permite concluir que los inversores se han inclinado más por posturas de cautela que por el optimismo del último trimestre del pasado ejercicio, cuando el Ibex se anotó una subida superior al 13%.
De enero a marzo se han producido subidas, pero de mucho menor calado: algo menos del 2%. Marzo, incluso, se ha saldado con la primera caída mensual desde agosto.
La actitud de los inversores entra dentro de lo normal, habida cuenta de las potentes subidas de los meses anteriores y de las dudas sobre el crecimiento económico, especialmente en Europa y Japón.
Los índices bursátiles, y más en concreto el Ibex, parece que se han tomado un respiro tras el optimismo del año pasado y a la espera de que se confirmen tendencias tanto relativas al crecimiento como a la agresividad de las subidas de los tipos de interés oficiales en Estados Unidos.
En realidad no hay nada nuevo en el horizonte. Las casas de análisis ya avisaron a comienzos de año que para este ejercicio no esperaban subidas extraordinarias en Bolsa; no llegarán, decían, a los dos dígitos. Hasta el momento han dado en el clavo.
Afirman los analistas que el fondo del mercado es bueno, aunque no ocultan cierta preocupación, quizá más a corto plazo, por el impacto que pueda tener el precio del petróleo sobre la inflación y en consecuencia sobre los tipos de interés. 'Estamos comenzando a tener un aumento de la volatilidad y, por ello, el riesgo a corto plazo está aumentando', sostiene el informe de estrategia de una casa de análisis.
Y, sin embargo, la percepción generalizada es que las valoraciones -más en Europa que en Estados Unidos- no están caras todavía. Pero para que las Bolsas rompan sus resistencias hace falta algo más. Veremos qué detonantes trae el trimestre que ahora empieza.