'El área comercial del Abbey está tan mal que hay posibilidades de hacerlo mejor'
El Santander se ha llevado algunas sorpresas al aterrizar en el Reino Unido y la mayor ha sido las condiciones de la red comercial del Abbey. El banco acelerará el recorte de empleos y concentrará en este año la reducción de 3.000 puestos.
Desde la City se ven las cosas de otra manera'. Y el aterrizaje en el Reino Unido ha traído sorpresas de la mano de la red comercial del Abbey. 'Está tan mal que hay posibilidades lógicas de hacerlo mejor', señaló el presidente del SCH, Emilio Botín. Tras la integración del banco británico, que aporta 18 millones de clientes y 730 oficinas, el SCH generará el 38% del negocio en el Reino Unido.
Y la entidad ha puesto el acelerador a los 100 días de controlar el Abbey: los 3.000 puestos de trabajo que tenía previsto recortar en los próximos tres años, se realizaran todos en 2005, con un primer recorte de 2.000 empleos en el primer semestre del año. Botín no quiso precisar si se barajan nuevos recortes para futuros ejercicios.
Tras la 'puesta a punto' del británico, el objetivo será precisamente relanzar la red comercial así como integrar la plataforma financiera Partenón. El Santander ha elevado hasta 225 millones de euros los ahorros que obtendrá en el primer año de la compra del británico, frente a los 150 millones apuntados inicialmente. El objetivo estará puesto en la red de oficinas, duplicando el número de vendedores y simplificando la gama para potenciar la venta cruzada.
En cuanto a la evolución del negocio en el resto de Europa, que representa el 10% del total, Botín apuntó a que la financiación al consumo ha 'registrado una fuerte expansión', con un incremento de la producción del 30%, gracias a las adquisiciones en Polonia, Noruega y Holanda.
El presidente del SCH insistió en que se harán campañas de captación de pasivo en Alemania e Italia, donde no hay planes para incrementar participaciones.
El máximo responsable del Santander se refirió al banco como un 'líder multilocal que tiene presencia en dos continentes y tres áreas monetarias diferentes'. Y precisamente en Latinoamérica, que aporta el 33% del beneficio del grupo, apuntó a que 'tenemos el tamaño, la diversificación y la capacidad para continuar bancarizando a la clase media'. El objetivo es duplicar el negocio en los próximos dos años y continuar ganado cuota, algo que se ha conseguido en todos los países. 'Seguro que el mercado acaba reconociendo el potencial', señaló Botín.
Sobre el negocio de remesas de emigrantes, el responsable en México dijo que 'existe un riesgo de blanqueo de dinero' y que el SCH pone el acento más en captar clientes que en la obtención de ingresos vía comisiones.
Recuperar la apertura de oficinas
El presidente del Santander reconoció ayer que la política de clausura de cerca de 2.000 oficinas en los últimos años, fue un error. Por ello, la entidad prevé recuperar las aperturas y tiene previsto abrir 100 nuevas oficinas en España en este año y mantener el ritmo de crecimiento de la red en 2006 y 2007. Botín apuntó a que esta experiencia 'nos ha servido para no hacer lo mismo en América'. Los planes de la entidad para este ejercicio se enmarcan en potenciar el crédito a empresas, y seguir impulsando el negocio hipotecario y los de fondos de inversión, tarjetas y seguros. Como parte de la política de crecimiento, Alfredo Sáenz, consejero delegado del banco, destacó que se mantendrá la estrategia de costes planos de forma que 'se cierre la mandíbula entre ingresos y costes y se continúe potenciando el crecimiento'. Y este crecimiento se ha conseguido con una mayor calidad, según Sáenz. El área española ha cerrado el ejercicio con un beneficio neto de 1.041 millones de euros, un 12,4% más que el año anterior. En sus cuentas destaca el incremento en el crédito hipotecario, que se mantuvo al alza un 23%. Los responsables del Santander destacaron la evolución de la hipoteca Superoportunidad con 11.700 millones de euros de producción, la misma cifra que obtuvo en el año 2003. En cuanto a la evolución de los fondos de inversión, estos crecieron un 11% mientras que los planes de pensiones lo hicieron un 10%.