Control de calidad para los móviles
Después de numerosas cavilaciones en los últimos años, el Estado cumplirá con su obligación de proteger los derechos de los usuarios de telefonía. Así se desprende de la convocatoria realizada ayer por el Gobierno a través del BOE para que un consultor independiente asuma la tarea de analizar la calidad del servicio de telefonía móvil.
El Ministerio de Industria ha tomado este camino después de no hallar eco suficiente en los tres operadores del sector. El concurso urgente convocado por el Gobierno es una salida a la falta de respuesta de las empresas a la petición oficial de que, ellas mismas, elaboraran un baremo estándar de niveles de calidad para medir el servicio prestado a los consumidores. Ahora, con esta convocatoria de ofertas, que finaliza el 11 de febrero y cuyo fallo se conocerá el 2 de marzo, se abre una fase inédita de control de calidad del servicio telefónico en España.
El adjudicatario de este concurso deberá elaborar una metodología y un trabajo a través de un mínimo de 8.000 llamadas de prueba por cada operador para medir tres cuestiones: llamadas no completadas, llamadas interrumpidas y calidad de la voz. Hasta aquí los usuarios han sido, hasta cierto punto, conejillos de Indias de las novedades que introducen las compañías. Y, de hecho, sin poder utilizar con fiabilidad la cobertura y otros servicios de la telefonía móvil. La orden ministerial que está preparando el Gobierno, también obligará a los operadores a compensar a los consumidores en caso de incumplimiento de sus ofertas.
Antes del verano, entonces, se debe disponer de un análisis de la calidad del servicio de móviles y, sobre todo, se habrá dado el primer paso para hacer más estricto el cumplimiento del marco regulatorio a través de la nueva normativa en elaboración. Además, la introducción de un asesor externo tiene que servir para que se ejerza un control de calidad que derive en un mejor funcionamiento del servicio para el usuario.