Explosión de la música por internet
Doscientos millones de canciones, unos 20 millones de CD, han convertido a Apple en el mayor distribuidor de música en internet. Su tienda iTunes ha logrado que millones internautas en todo el mundo pasasen del gratis total de las redes de intercambios de archivos P2P (peer to peer, entre iguales), como Kazaa o eMule, para empezar a pagar por la música que se descargan en internet.
Su secreto: ofrecer un oferta muy variada (su catálogo suma 700.000 canciones) a un precio bajo (0,99 euros por canción) de manera sencilla (bastan dos clics, una vez el usuario se ha suscrito, para comprar la canción). A esto se suma la ventaja, a diferencia de las redes P2P, de que no existe tanto riesgo de infecciones de virus, ni de recibir publicidad no solicitada, ni de ser denunciado por la industria discográfica por no pagar derechos de autor como está sucediendo en EE UU y ha empezado a pasar en Italia y otros países europeos.
A pesar de estos riesgos, las programas de intercambio entre particulares al estilo de Kazaa, Gnutella o eDonkey generan ya el 60% del tráfico en internet, según la consultora británica Ovum. España, perezosa para engancharse a muchas otras tecnologías, se sumó a la fiebre P2P ocupando un lugar muy destacado en el uso de estas redes cuyo reclamo es, pese a quien le pese, muy atractivo: toda la música del mundo totalmente gratis con sólo buscarla en el ordenador de otro internauta.
Las redes P2P han ido extendiéndose por mucho que Afyve (Asociación Fonográfica y Videográfica Española) y la SGAE (Sociedad General de Autores Españoles) hayan advertido reiteradamente que no pagar los correspondientes derechos a los autores y los productores es está esquilmando al sector musical.
Lo cierto es que hasta hace poco más de dos meses, los internautas españoles no tenían una alternativa legal para comprar música en Internet. Apple fue la primera gran multinacional en traer su servicios de descargas de canciones a España. Tras ella, Terra presentó su servicio Música Premium, y se han ido sumando el portal de Microsoft, Wanadoo y otros actores más inesperados, como Carrefour, que ha creado su propia tienda de música.
De hecho, se espera que la próxima generación de cibertiendas musicales procedan el mundo de la distribución. La próxima puede ser la Fnac, que ya tiene su sitio de descargas en Francia y en el sector se espera que El Corte Inglés no tarde en entrar al negocio de descargas.
Estas no son las primeras cibertiendas musicales que existen en España. Los40.com, que basa su tienda en la plataforma de OD2 al igual que MSN Music y Wanadoo, lleva años vendiendo canciones en MP3 sin una repercusión tan masiva, lo mismo que otros sitios como MTV.es o Tiscali.
El funcionamiento de estas tiendas es muy similar. Primero hay que descargarse un programa gratuito, que permitirá reproducir y gestionar las canciones y vídeos. Lo siguiente es darse de alta, rellenando un sencillo formulario, en el que se incluirán los datos de la tarjeta de crédito de modo que una vez que el usuarios esté registrado en el servicio sólo tenga que hacer clic en el botón de compra para hacerse con la canción.
Descargas Páginas que venden música
www.apple.com/ es/itunes Ofrece el software y 700.00 canciones a 0,99 euros o 9,99 por álbum. La versión estadounidense es más barata: 0,99 dólares la canción.los40.com y ritmic.com de Wanadoo son adaptaciones de OD2. Funcionan por prepago. Con 0,99 euros se compra una canción o hasta 99 escuchas.www.music.carrefour.es Es la tienda más reciente que ha roto precios con canciones que empiezan en los 0,75 euros pero que pueden llegar a costar 1,20 euros.www.music. msn.es Microsoft ha optado por subcontratar a OD2 la creación de su tienda. Con un catálogo de 400.000 canciones, funciona por prepago.musicapremium. terra.es Terra permite descargas de 0,99 a 1,50 euros, álbumes de 6,95 a 11,95 euros y tiene un servicio de suscripción desde 6 euros, sin IVA.www. weblisten.com Lleva siete años en el mercado y casi cinco en los juzgados enfrentándose a Afyve, quien dice que es ilegal. Da una tarifa plana por 1 euro diario.
Los tribunales españoles no persiguen el intercambio
¿Es un delincuente quien intercambie canciones sin pagar en internet? Según a quién se pregunte se obtendrá una respuesta diferente a esta cuestión. Los hechos nos dicen que nadie en España ha sido denunciado ni condenado por descargar música de la red a través de una red de intercambio entre particulares.Pero esto puede cambiar. El Ifpi, la asociación discográfica internacional en la que está representada la española Afyve, empezó una campaña para perseguir a los usuarios europeos que hasta el pasado octubre usaban Kazaa y redes similares sin ningún temor. En total interpusieron 459 denuncias en distintos países europeos.En EE UU, la industria discográfica ha logrado que se multe a estudiantes, muchos adolescentes, que descargaban música desde casa de sus padres.El debate gira en torno al derecho a la copia privada, que en Estados Unidos no está reconocida. En España los usuarios tienen derecho a copiar en sus casas una canción, por lo que las cintas vírgenes, vídeos y CD incluyen un canon para compensar las pérdidas a los autores.Las dudas surgen cuando se plantea si estas redes que permiten copiar una canción de un ordenador a otro están consideradas dentro del derecho a la copia privada. Desde la SGAE tienen claro que no. 'Desde el momento que se realiza una copia para ser distribuida, ésta pasa a ser pública', defiende Juan Neri, director general de SDAE, versión digital de la sociedad de autores.Para otros, con la Asociación de Internautas al frente, la diferencia está en si se realiza la copia con el fin de venderla. Si hay intención de lucro deja de ser copia privada, pero si la canción se intercambia gratuitamente o a cambio de otras canciones, no hay delito, según esta teoría.El nuevo Código Penal no termina a aclarar este asunto, por lo que hasta que no haya una denuncia y se pronuncien los tribunales al respecto no se sabrá con exactitud si es perseguible el intercambio de archivos entre particulares en internet.