Bruselas planea crear un órgano de supervisión de la auditoría
La Comisión semuestra preocupada por la excesiva concentración del sector auditor, donde las §big eight§ han pasado a ser las §big four§
La profesión auditora se enfrenta a importantes cambios. Muchos de ellos aún son respuesta a los escándalos financieros de Enron, Ahold Worldcom o Parmalat. Otros son consecuencia de la introducción de las normas contables internacionales, que entrarán en vigor en sólo unos días. Además, la industria sufre lo que desde la Comisión Europea se considera una excesiva concentración, con la existencia de tan sólo cuatro grandes firmas (KPMG, PricewaterhouseCoopers, Deloitte & Touche y Ernst & Young).
Un panorama bastante alejado de lo que sucedía hace poco más de una década, cuando las grandes auditoras eran ocho. Durante un tiempo quedaron reducidas a las que se conocieron como big five. Pero en septiembre de 2002, con la desaparición de Andersen, afectada por el escándalo de Enron, la situación se agudizó y las grandes firmas pasaron a conocerse como las big four.
El director general de mercado interior de la Comisión Europea, Alexander Schaub, manifestó la semana pasada durante la celebración en Bruselas de una conferencia que bajo el título de Una nueva era para la auditoría organizó la Federación de Expertos Contables Europeos (FEE) su preocupación por la 'excesiva concentración de la industria auditora'.
¿Puede asegurarse la independencia con un panorama de tanta concentración en elsector?, se preguntó Schaub
Como muestra de este fenómeno, señaló que de acuerdo con los datos de la publicación Accountancy Market Report 2003, las big four auditaron a las cien mayores compañías cotizadas en Gran Bretaña. 'Esta concentración de la industria es un asunto preocupante', recalcó Schaub. 'Algunas grandes empresas utilizan tanto los servicios de auditoría como el resto de los que ofrecen las firmas auditoras. ¿Puede asegurarse así la independencia? Es difícil responder a esta pregunta, pero los reguladores y los legisladores deberán seguir muy de cerca la concentración que se vive en el sector', aseguró el director general de mercado interior, que también anunció que la Comisión Europea prevé la elaboración de un estudio sobre este problema que afecta al sector.
Precisamente es en este marco de atención sobre la evolución de la auditoría en Europa en el que se sitúa la intención de la Comisión de crear un órgano supranacional de supervisión. Así lo aseguró también Alexander Schaub. También avanzó que el nuevo organismo, que previsiblemente se pondrá en marcha durante el próximo año, se encargará de coordinar los supervisores de cada uno de los 25 estados miembros y que trabajará en estrecha colaboración con su homólogo en Estados Unidos, el Public Company Oversight Board (PCAOB).
'Necesitamos disponer de un sistema de supervisión de la profesión auditora que además respete las diferentes culturas de cada uno de los estados miembros de la UE. Este organismo deberá encargarse de la relación con otras estructuras, como el Public Company Oversight Board en Estados Unidos. Estamos en el mismo barco y podemos aprender los unos de los otros', explicó Schaub ante los profesionales europeos de la auditoría.
Por su parte, el presidente del Public Company Oversight Board (PCAOB), que también participó en la reunión, mostró su apoyo a la creación de este organismo encargado de la supervisión de la calidad de la auditoría en Europa.
Willian McDonough, coincidió así con Alexander Schaub en la necesidad de trabajar codo con codo para garantizar la calidad de las auditorías. El presidente del regulador estadounidense recordó que 'no fue una casualidad que su primer viaje como presidente de PCAOB fuera de Estados Unidos fuera a Bruselas el mes de septiembre del pasado año'.
En todo caso, la nueva estructura de supervisión europea aún debe terminar de definirse. Lo que sí es ya seguro es que además de coordinar a los supervisores nacionales, se encargará de colaborar con la Comisión Europea en la finalización de la nueva legislación comunitaria sobre auditoría, que está modificando la octava directiva.
Respecto a este punto, la Federación de Expertos Contables Europeos (FEE) mantiene que el futuro texto deberá evitar la posibilidad de que los estados opten entre exigir la rotación de firma auditora cada siete años o de equipo auditor, como se contempla en el actual borrador de la norma. 'La rotación obligatoria de firma puede afectar a la calidad de las auditorías', advierten los auditores europeos.
Bill Mcdonough: Presidente del PCAOB, órgano supervisor de EE UU
'El PCAOB debe verse como un aliado'
'Tenemos la obligación de restaurar la confianza de los inversores en los mercados y los auditores deben conseguir devolver a los accionistas la fe en su profesión', explicó la semana pasada el presidente del Public Company Oversight Board (PCAOB), el organismo supervisor de las firmas auditoras a los profesionales europeos reunidos en Bruselas para hablar de los retos del sector. Willian McDonough recordó que los objetivos de la entidad que él preside coinciden plenamente con los que se ha marcado la Comisión Europea con la creación del futuro órgano de supervisión. McDonough recordó que, de acuerdo con la ley Sarbanes-Oxley, ninguna firma auditora puede auditar a una compañía cotizada si no está registrada en el PCAOB. En la actualidad, hay 1.423 firmas registradas en este organismo estadounidense, de ellas 530 tienen su sede fuera de Estados Unidos.
David Devlin: Presidente de la Federación de Expertos Contables Europeos
'Se avecina una revolución para el sector'
El presidente de la Federación de Expertos Contables Europeos (FEE), que representa a la profesión auditora en Europa y engloba a 41 institutos de 29 países, aseguró la semana pasada en Bruselas durante un encuentro de la profesión que los auditores están preocupados por la llegada de las normas contables internacionales. 'La nueva contabilidad va a ser un auténtico reto', aseguró David Devlin.Pero éste no es el único asunto por el que la profesión muestra su preocupación. También siguen muy de cerca el desarrollo de la modificación de la directiva que afecta a la auditoría (la octava) y que está redactando la Comisión Europea. 'Apoyamos la reforma, pero aún se puede mejorar sobre lo que ha propuesto la CE', aseguró Devlin. Los auditores pretenden que se elimine del texto la posibilidad de que los estados miembros puedan elegir entre la rotación del equipo o de la firma auditora.
Alain Joly: Preside la Asociación Europea de compañías cotizadas
'La rotación de auditoras no beneficia a las empresas'
Alain Joly es presidente del consejo de supervisión de Air Liquide y de la Asociación Europea de Empresas Cotizadas, EALIC, en sus siglas en inglés. Joly reconoce que la sofisticación de los instrumentos financieros ha contribuido a la necesidad de poner más énfasis en la vigilancia del buen funcionamiento del sistema. El presidente de la asociación de empresas cotizadas asegura ser un firme defensor de la labor de los comités de auditoría en la mejora del gobierno de las empresas. También considera beneficiosas las nuevas reglas de auditoría que prepara la Comisión Europea, aunque en este aspecto señaló que la rotación excesiva de las firmas auditoras puede perjudicar a las empresas. 'Hay que tener en cuenta que es difícil entender el negocio de una gran empresa y eso lleva su tiempo también al auditor. Una rotación excesiva puede reducir la calidad de las auditorías', señala Joly.