La elevada deuda de las familias
El Banco de España ha presentado una primera radiografía sobre la situación financiera de las familias y, como resultaba previsible, el informe indica que la vivienda es el principal activo financiero de los hogares y también la principal fuente de endeudamiento. El documento pone en evidencia que las familias españolas gozan de una situación financiera relativamente robusta (las deudas suponen de media un 8,6% de sus activos totales) y están en condiciones de hacer frente a sus deudas, incluso si se produjese una subida en los tipos de interés. Sin embargo, la ratio de endeudamiento ha pasado del 73% de la renta bruta disponible en 2002 al 100% este año. Un ritmo de crecimiento que el organismo considera 'insostenible'.
El temor del Banco de España no es tanto que aumente el índice de morosidad (ahora en mínimos históricos) como que los pagos para hacer frente a este creciente endeudamiento terminen frenando el nivel de consumo y, con ello, dañando el crecimiento. Si esa contracción de la demanda deteriora la situación económica y en algún momento empieza a destruirse empleo, la economía podría entrar en un círculo vicioso en el que las deudas de los hogares sí se convertirían en un peligroso lastre para los hogares, el sistema bancario y la economía nacional en general.
Pero los temores del antiguo banco emisor, transformados en súplicas de moderación a la banca, han caído en saco roto, al menos por ahora, ya que el crédito hipotecario toma valores crecientes cada mes y, a juzgar por el comportamiento del mercado inmobiliario, seguirá haciéndolo en el medio plazo. Dado que la autoridad monetaria está en Fráncfort y no baja al detalle de lo que ocurre aquí, no estaría de más escuchar más y extremar la cautela, enfriar el mercado y evitar un parón irreversible de la actividad.