_
_
_
_
Contabilidad Nacional

El sector exterior resta dos puntos al crecimiento económico

La economía española creció un 2,6% en el tercer trimestre sobre el mismo periodo del año anterior, con una sólida recuperación de la inversión y el mantenimiento del consumo. El desequilibrio sigue aportándolo el sector exterior, que resta un 2% al crecimiento, la tasa más alta desde principios de 2000.

La economía española no crecerá este año el 2,8% estimado por el Gobierno, pero sí consolida un avance del 2,6% en datos constantes corregidos de efectos estacionales y de calendario y mantiene un diferencial apreciable sobre la UE. El tercer trimestre ha dado muestras de estabilizar el ritmo de crecimiento en la citada cifra, con una pequeña aceleración en tasa intertrimestral, en la que ha aumentado un 0,6%, más que en el segundo trimestre del año. Sin embargo, mantiene una composición desequilibrada, según los datos aportados por el Instituto de Estadística.

La demanda interna aporta un crecimiento del 4,2%, tras una aceleración en la inversión y el mantenimiento de la solidez del consumo. Pero el sector exterior deteriora alarmantemente su aportación a la actividad, y resta 2 puntos de crecimiento del PIB en tasa interanual, cota desconocida desde principios de 2000. Tomando un año completo no se registra aportación tan negativa desde 1989.

La fortaleza de la demanda interna tira de las importaciones un 9,6% (más del doble que hace un año, con un 10,6% más en las compras de bienes), ayudada por la fortaleza del euro. Pero el comportamiento de las exportaciones no compensa la fuerza de las compras, y solo crecen un 4,2%.

La industria recupera el pulso de la actividad y cede el sector de los servicios

La aportación negativa de la demanda externa al PIB se ha deteriorado súbitamente en los últimos trimestres, tanto en la venta de bienes como de servicios, pero especialmente de este ultimo componente, que ha entrado en crecimientos negativos en los últimos cinco trimestres.

La demanda interna, por contra, ha equilibrado su composición y ha ganado solidez, fundamentalmente por la recuperación de la inversión. El componente de la formación bruta de capital más pesimista en trimestres pasados (el gasto en bienes de equipo) ha tomado el protagonismo y crece ya a tasas del 9,8%, y se convierte, por contra, en acelerador de las importaciones. Hace tan sólo dos trimestres este componente de la demanda de inversión estaba en tasa negativa. El agregado de inversión crece un 5,9%.

En el consumo la variable más dinámica es el gasto público, que crece un 4,4%, con una pequeña aceleración, mientras que el de los hogares conserva un avance más moderado. El consumo final se acelera impulsado por las administraciones públicas.

Desde el punto de vista de la oferta se ha registrado una mejora notable en la industria en el tercer trimestre, con avance interanual del 2,9% (2,3% un trimestre antes), y un descenso de la pujanza de los servicios. La construcción mantiene el vigor, con un ligero repunte incluso, y crece un 4,5% interanual; sigue siendo el componente más dinámico de la oferta, con mejora en la obra civil y en la edificación.

Más información

Archivado En

_
_