Las compañías aéreas plantean al Gobierno una segunda liberalización
Las aerolíneas de AECA han solicitado al Gobierno que aborde una segunda liberalización del sector aéreo. Su propuesta pasa por abrir a la libre concurrencia el handling, los acuerdos bilaterales para poder volar a otros países, y los servicios comerciales en los aeropuertos.
Mientras el Ministerio de Fomento y AENA deliberan sobre el decisivo reparto de la nueva terminal del aeropuerto de Madrid-Barajas, que está previsto que se decida hoy en el consejo convocado al efecto por el ente público propietario de la red de aeropuertos, las aerolíneas que operan en España agrupadas en AECA han pedido al Gobierno que aborde una segunda liberalización del sector aéreo en España. Esta nueva oleada liberal vendría a completar la primera, impulsada por el PSOE en su anterior mandato.
Ante la fuerte competencia que se vive entre los operadores, sobre todo a raíz de la irrupción de las aerolíneas de bajo coste, el sector propone que se estimule la competencia también en tierra, en los aeropuertos, cuya rigidez pone, a su juicio, en peligro la viabilidad del sector, según explica el presidente de AECA, Felipe Navío.
Las aerolíneas proponen un paquete de medidas que implican la liberalización total de los servicios aeroportuarios (handling), de tal manera que no sea necesario contar con licencia para operar, lo que supondría acabar con el modelo actual de concesión única en los pequeños aeropuertos y de doble concesión en los grandes.
También, y con vistas a impulsar nuevos flujos turísticos, Navío ha propuesto a la Secretaría General de Turismo que se liberalicen al máximo los acuerdos bilaterales para volar a otros países, especialmente hacia aquellos que generan turismo, con el objetivo de que si la compañía de bandera Iberia no quiere operar en esas rutas, pueda hacerlo cualquier otra empresa.
Asimismo, y también en los aeropuertos, el presidente de AECA cree necesario liberalizar los servicios comerciales y de suministro para aumentar su eficiencia y bajar los precios que repercuten en operadores y viajeros.
En cuanto a la política de tasas de AENA, las aerolíneas han solicitado al Ministerio de Fomento que se establezca un sistema flexible que permita bajarlas en temporada baja para incentivar el tráfico y subirlas en época punta.
Navío afirma que el ente público que gestiona los aeropuertos no puede ser el único agente del complicado negocio aéreo que mantenga sus ingresos en permanente crecimiento, mientras que el resto de los actores sufren en sus cuentas la guerra de tarifas y la brutal subida del precio de los combustibles.
Asimismo, esta patronal reclama que la mitad de lo que se recauda por tasas de seguridad y que ahora va a Hacienda de forma íntegra, se quede en AENA para mejorar esos servicios de protección y para prevenir futuras subidas de las tasas.
Fractura entre las distintas alianzas
La disparidad de criterios en el sector sobre asuntos clave ha provocado un cisma. Hace pocos meses, Iberia y Air Europa crearon una nueva asociación, que rivaliza con AECA, liderada por Spanair. Hace dos semanas, esta aerolínea y otras ocho compañías aéreas extranjeras (Air Berlín, Aerolíneas Argentinas, Austrian Airlines, Lufthansa, SAS, Thai, US Airways y Varig) anunciaron la creación de la Asociación de Compañías Aéreas en España (ACA), que tratará de luchar contra 'los privilegios y buscará la no discriminación del transporte aéreo frente a otros modos de transporte'. Esta patronal está 'en contra de Iberia' por la posición que ha tomado en el reparto de la nueva terminal del aeropuerto de Barajas (Madrid).