Los paisajes oníricos de Dalí
El Museo Reina Sofía reúne por primera vez tres obras de Salvador Dalí que abarcan su periodo de máxima actividad dentro del movimiento surrealista. Se trata de Paisaje con muchacha saltando a la cuerda (1936), El pecado original (1941) y Persistencia del buen tiempo (1932-1934), que podrán verse en la sala 10 de la colección permanente (Santa Isabel, 52. Madrid) hasta el 31 de enero de 2005.
La exhibición del conjunto se enmarca dentro de los actos conmemorativos del centenario del artista ampurdanés y ha sido posible gracias a la colaboración del Museo Boijmans de Rotterdam, la Fundación Gala-Dalí y el Salvador Dalí Museum de Saint Petesburg, Florida.
Son obras que no son fáciles de ver fuera del circuito expositivo de los museos que las guardan. Con esta cesión excepcional, las entidades responden a la colaboración que el Museo Reina Sofía ha prestado en la organización de las exposiciones preparadas con ocasión del Año Dalí y que se ha traducido en una merma de su colección permanente. Una cuestión de reciprocidad, según la directora del Reina Sofía, Ana Martínez de Aguilar, quien recordó ayer durante la presentación de las tres obras que la sala de Dalí es la segunda más visitada del museo, después de la del Guernica.
A pesar de que Dalí se incorporó al movimiento surrealista de André Breton en 1929, fue a principios de los años 30, después de la producción de Un perro andaluz y La edad de oro, cuando desarrolló en toda su madurez sus paisajes oníricos, repletos de dobles imágenes, según William Jeffett, del Salvador Dalí Museum de Florida.
Paisaje con muchacha saltando a la cuerda formó parte de la antigua colección de Edward James, ahora en la colección del Museo Boijmans Van Beuningen de Rotterdam (la pinacoteca holandesa colaboró este año con el Museo del Prado en la organización de la exposición sobre los tapices de Aquiles diseñados por Rubens). La colaboración entre el Reina Sofía y el Museo Boijmans prevé la restauración del cuadro de Dalí.
El pecado original presenta la visión de Dalí del pasaje bíblico en el que Eva es tentada por el demonio en forma de serpiente. Prestado por la Fundación Gala-Dalí, en él se ve el pie de Eva (el de Gala).
Persistencia del buen tiempo fue adquirido a Dalí por los coleccionistas Reynolds Morse y actualmente forma parte de su legado, que se exhibe permanentemente en las salas del Salvador Dalí Museum, en Saint Petesburg, Florida.