El petróleo de la OPEP alcanza los 43,54 dólares y marca nuevos máximos
El barril de crudo de la OPEP se vende hoy a 43,54 dólares, pulverizando su anterior récord del 20 de agosto y que alcanzó los 43,16 dólares. El cártel justifica la subida por el riesgo que supone para el mercado una interrupción del suministro en Nigeria, aunque asegura que tiene capacidad suficiente para aumentar la producción en un intento por frenar la escalada de precios que amenaza la economía internacional.
"La amenaza de una interrupción de la producción en Nigeria, el quinto exportador mundial de crudo, parece haber sido el factor principal que ha impulsado los precios de la energía", señala la OPEP. La situación en Nigeria ha agudizado los temores a problemas de abastecimiento en un mercado ya muy ajustado, con las reservas almacenadas en EE UU, el mayor consumidor mundial de petróleo, a niveles muy bajos debido a los problemas causados por el paso de huracán Iván en las instalaciones petroleras y puertos del Golfo de México.
La escalada del precio del barril de la OPEP coincide con el fuerte encarecimiento de los crudos de referencia en Europa y EE UU, que ayer tocaron máximos históricos al venderse a 46,8 y 50,47 dólares por barril, precios que se moderan hoy ligeramente después de la decisión anunciada por Arabia Saudí de incrementar su producción para calmar al mercado.
Aumentar la producción
Pero la OPEP también ha lanzado hoy un mensaje tranquilizador al mercado. Su presidente, Purnomo Yusgiantoro, ha afirmado en un comunicado que la organización puede aumentar su producción entre 1,5 y 2 millones de barriles por día y que hará lo posible para proteger la economía mundial. Este aumento se sumaría a los cerca de 28 millones de barriles que cada día producen los países miembros de la OPEP (todos menos Irak), aunque su cuota oficial vigente es de 26 millones y pasará a 27 millones el 1 de noviembre, según el acuerdo alcanzado por los ministros de la organización el pasado día 15 en Viena.
Yusgiantoro añadió que los altos precios del crudo no se deben a desequilibrios en los fundamentos, sino que están siendo impulsados por la incertidumbre en torno a los suministros, lo que ha instalado un "factor miedo" en el mercado y aumentado la especulación. "La OPEP ha estado tratando el problema asociado con la oferta y la demanda y seguiremos haciendo eso. Al mismo tiempo reconocemos que la actual situación no está causada por los fundamentos del mercado", asegura.