Las Bolsas se preparan para el nuevo ciclo alcista de los tipos
La subida de los tipos en EE UU es cuestión de tiempo. La reacción tradicional es de fuerte corrección. Así sucedió en 1987 y 1994, y así esperan los analistas que ocurra esta vez. El factor diferencial es el entorno económico alcista, que permite anticipar suavidad en las caídas y un ciclo más 'normalizado' en las Bolsas.
El propio presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, lo anticipó en su discurso de la semana pasada ante el Senado: 'Si la historia sirve de guía, las previsiones competitivas deberán, en el algún momento, virar hacia una compensación en los salarios reales a expensas de los beneficios. Ese cambio, junto a mayores avances en el empleo, debería hacer que la participación del trabajo en la renta total comience a crecer hacia niveles más normales'. Los analistas creen que llega la hora de la normalización también en los tipos de interés, que deben abandonar niveles reales próximos a cero. La reacción irremediable en las Bolsas será de bajadas, pero los expertos creen que este movimiento será positivo para el mercado.
'La normalización del ciclo implicará generación de empleos y salarios y, al mismo tiempo, tasas de beneficios a un sólo dígito', advierte Juan Laborda, de Barclays Bank. 'Esto implicará un ajuste a la baja de la Bolsa para asumir múltiplos de valoración más realistas, más razonables', añade el experto, que destaca el carácter de 'sostenibilidad' de un ciclo con esas características.
En 1994, el último gran ciclo alcista de tipos, la Fed comenzó a encarecer el precio del dinero desde 3% en enero hasta el máximo del 6% al año siguiente. La Bolsa, tanto en EE UU como en Europa, interrumpió el canal alcista que arrastraba y comenzó a ajustarse a la baja. Las carreras volvieron, sin embargo, cuando los tipos estabilizaron su subidas. Así el Dow Jones pasó entre diciembre de 1994 y diciembre de 1995 de 3.600 puntos a más de 5.100. El resultado final es que, en enero de 1996, los tipos de interés eran prácticamente el doble que dos años antes y la Bolsa había terminado subiendo más de 41%.
'La normalización implicará incrementos más moderados de los beneficios'
La Reserva Federal mantiene los tipos de interés en el 1% desde junio de 2003 y el mercado anticipa un incremento de entre 0,25 y 0,5 puntos porcentuales en las reuniones de junio o agosto. Las experiencias recientes pueden invitar al optimismo, pero los analistas lo matizan. 'El escenario de recuperación no es el mismo de siempre, se ha conseguido con una política monetaria y fiscal muy agresiva y el nivel de endeudamiento es inmenso, Greenspan debería tenerlo en cuenta', señala Fernando Hernández, de Inversis. Una visión en la que coinciden otros expertos. 'El alto endeudamiento y las bajas tasas de ahorro recomiendan un comportamiento muy moderado', asegura Simon Brewer, de Morgan Stanley. 'En Europa, el impacto de unos intereses más altos en EE UU es poco probable que ayude a un bloque económico que pide a gritos una reforma estructural', afirma el economista.
Un asunto diferente es el de los bonos. En ese segmento las previsiones son de un panorama más difícil, toda vez que el crecimiento ya está en marcha en los principales motores económicos.
'Creo muy poco en el mercado de bonos, parece que han descontado una subida de tipos demasiado pronto', opina Michele Boldrin, de la Universidad de Minnesota. Tras los últimos datos de empleo y actividad en EE UU, el precio de los bonos ha caído en picado. Así, el interés ofrecido por estos títulos, que discurre en sentido inverso al precio, ha pasado en el caso de los papeles con vencimiento a 10 años del 3,68% al 4,45% en menos de un mes.
Cambio de guión en la Reserva Federal
La inflación vuelve a ser tema de debate en la mesa de la Reserva Federal. 'Los datos recientes sugieren que la preocupante tendencia de desinflación ha llegado presumiblemente a su fin', reconoció Greenspan la semana pasada en su comparecencia ante el Senado.'Con el IPC creciendo desde enero y subiendo ahora a un ritmo anualizado del 5%, muchos en la Fed plantearán la cuestión de la necesidad de subir tipos en la reunión del 4 de mayo o en la del 29 al 30 de junio', señala la consultora Thomson Financial.'Vemos los comentarios de Greenspan como una señal de que el texto de la declaración de la reunión del 4 de mayo tiene que cambiar'. Los mensajes que la Fed publica cada reunión son prácticamente idénticos; hay en ellos leves matices que terminan siendo pistas fundamentales. La frase que los inversores buscarán y que prevén que desaparecerá del próximo comunicado es la de que 'la Fed puede ser paciente', antes de eliminar su política acomodaticia.La reacción inicial de las Bolsas ante los comentarios de Greenspan fue de fuerte corrección, aunque luego las Bolsas repuntaron hasta regresar al punto de partida. La próxima cita clave, dentro de una semana.