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Tabaco

Philip Morris pagará 1.000 millones a la UE por el conflicto del contrabando

Philip Morris indemnizará a la Unión Europea con 1.000 millones de euros a cambio de que Bruselas retire las acusaciones de contrabando presentadas en EE UU contra el fabricante de Marlboro. La Comisión Europea quiere aceptar el trato y sólo espera para hacerlo el visto bueno de los 10 países, entre ellos España, que apoyaron la demanda inicial.

La comisaria de Presupuesto, Michaele Schreyer, confirmó ayer en rueda de prensa que la Comisión Europea (CE) y la empresa tabacalera estadounidense Philips Morris vienen negociando desde hace varios meses un acuerdo que muy probablemente resuelva las disputas que sobre contrabando y falsificación de tabaco mantienen ambas partes.

Aunque las negociaciones todavía no han terminado, Schreyer adelantó que el borrador del acuerdo prevé jugosos pagos que la multinacional estadounidense deberá transferir a lo largo de varios años a la cuenta de la Unión Europea (UE) y de los 10 países, entre ellos España, que secundaron la demanda. Según fuentes próximas a la negociación la suma alcanzará los 1.200 millones de dólares (unos 1.000 millones de euros), pagaderos en plazos decrecientes durante los próximos 12 años.

Este dinero, que 'de ningún modo constituye una multa', según señaló la comisaria, 'servirá para financiar medidas contra la falsificación y el contrabando de tabaco en Europa'.

El acuerdo necesita el visto bueno del Gobierno de Zapatero y del Consejo de Estado

La CE ha subrayado que las negociaciones en curso trascienden ampliamente el tema de los pagos, pues contemplan una cooperación intensa entre la tabacalera estadounidense y las agencias europeas encargadas de vigilar el comercio de tabaco en la UE. Por esta vía, Bruselas espera que en un futuro próximo el modo de operar de Philip Morris en la UE 'sea apropiado y acorde con la ley'.

El borrador de acuerdo está pendiente todavía del beneplácito de la dirección de la compañía y de los 10 Estados miembros en nombre de los cuales Bruselas está negociando (Alemania, Bélgica, España, Finlandia, Francia, Grecia, Italia, Luxemburgo, Países Bajos y Portugal).

Fuentes próximas a la Comisión señalaron que de la suma que pague Philips Morris habrá que descontar los honorarios de los abogados que han defendido a la UE en EE UU. De la cantidad resultante, el 12% engrosará las arcas comunitarias y el resto se lo repartirán los 10 países que en su día suscribieron la denuncia. La portavoz de Schreyer se ha negado a confirmar esta información, limitándose a declarar que 'el uso del dinero es un tema todavía abierto y que se está discutiendo con los Estados miembros'.

En España, el visto bueno deberá darlo previsiblemente el próximo gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, previo dictamen del Consejo de Estado.

Philips Morris, por su parte, confía en que 'el acuerdo con la Comisión deje atrás todas nuestras disputas', según declaró el vicepresidente de la compañía David Davies. El litigio entre Bruselas y el gigante tabacalero se remonta al año 2000.

En noviembre de aquel año, la CE impuso una acción civil ante un Tribunal Federal de Nueva York contra varias empresas pertenecientes a los grupos Philip Morris, Reynolds y Japan Tabacco. Las acusaba de participar de un sistema de contrabando para introducir y distribuir cigarrillos en los territorios de la Comunidad y exigía una reparación económica equivalente al monto que por concepto de derechos aduaneros e IVA se habrían recolectado en el caso de una importación legal. Bruselas calculaba entonces que las pérdidas para el fisco comunitario y el de los países de la UE afectados podía situarse en unos 1.000 millones de euros al año.

El litigio sigue contra el fabricante de Winston

La solución extrajudicial de las acusaciones de contrabando contra Philips Morris no ponen fin a los litigios que Bruselas mantiene con varias multinacionales del sector. La Comisión Europea denunció en octubre de 2002 a la tabacalera estadounidense RJ Reynolds por presunto blanqueo de dinero en relación con las operaciones de falsificación y contrabando de tabaco en Europa. El caso era el enésimo coletazo de una denuncia original presentada en noviembre de 2000 contra Philips Morris, Reynolds y Japan Tobacco.La justicia estadounidense desestimó este caso (Bruselas ha vuelto a recurrir la decisión por segunda vez), pero abrió el camino para denuncias por blanqueo. Hasta ahora Bruselas sólo ha denunciado a Reynolds (fabricante de Winston) por ese concepto. Al anunciar el inminente acuerdo con Philips Morris, la comisaria europea de Presupuestos, Michaele Schreyer, se ofreció ayer 'a negociar con todo aquel dispuesto a combatir el contrabando'.

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