La junta de la división
Un tercio de los cerca de 3.000 accionistas que ayer se daban cita en la junta anual de Disney se levantaron a vitorear a Stanley Gold y Roy Disney, los ex consejeros disidentes de la empresa cuando tomaron la palabra ante ellos. Ante un público dividido, Gold dijo que el presidente Michael Eisner se enfrentaba a un 40% de los votos en blanco lo que en la práctica se toma como una moción de censura.
Patos Donald y ratones Mickey recibían en Filadelfia ayer a los accionistas de una empresa que iban a protagonizar la junta más tensa de su reciente historia. Al cierre de esta edición no se conocía el sentido del voto de los accionistas pero según Gold, hasta un 40% podrían haber dejado de apoyar la gestión de Michael Eisner y un 20% habrían hecho lo mismo contra tres de los miembros del consejo entre ellos, George Mitchell. Antes de que se hiciera público oficialmente un ersultado preliminar, Reuters aseguraba que los cálculos de Gold eran correctos. El ex consjero dijo que este pronunciamiento 'no tenía precedente'.
Aunque la oposición organizada hace cuatro meses por los dos ex consejeros ha crecido al sumarse un buen número de influyentes fondos de pensiones no se prevé que nada cambie inmediatamente. No hay candidato alternativo y con un solo voto Eisner puede continuar al frente de la empresa que preside y de la que es consejero delegado. Sin embargo, al consejo no se le escapa que un resultado como el que sugirió Gold es una moción de censura. Steve Case de Time Warner dejó la empresa en mayo tras la retirada de la confianza del 22% de los accionistas. Los analistas dicen que más del 15% de votos en contra es alarmante.
A pesar de que Mitchell defendía ayer que no se iban a dividir los papeles de presidente y consejero delegado hasta 2006, cuando toque renovar el contrato de Eisner, el consejo tenía previsto reunirse hoy y, según fuentes de The New York Times, a la vista de lo previsto que ocurriera en la junta anunciar la separación de los cargos. Para algunos de los fondos de pensiones, de los muchos que anunciaron su voto en contra, esto bastaría pero para otros, el propio Gold y Roy Disney, no. Ambos pedían ayer su salida de la empresa tras 20 años al frente. Muchos inversores pensaban que ayer se dio el paso para que ocurriera.
Pero ayer Eisner se defendió. 'Quiero esta empresa, el consejo quiere a esta empresa'. Eisner admitió que el resultado de la cadena ABC era decepcionante pero prometió que en la empresa hay talento, conocimiento y creatividad para que seguir en el camino del crecimiento. Sobre los disidentes, dijo que están 'fundamentalmente equivocados'.
Comcast: un convidado de piedra, a la espera
Comcast tampoco votará a favor de la gestión de Michael Eisner al frente de Disney. La empresa de cable que el 11 de febrero lanzó una OPA valorada en 54.100 millones de dólares ha comprado acciones y con dos millones se unirá a la disidencia a pesar de que desde esta también se está en contra de la venta de la empresa. Brian Roberts, el presidente de la compañía tenía previsto volver ayer desde Fenix donde se había reunido con un grupo de ejecutivos, un evento preparado desde hace un año y que le impidió seguir de cerca la junta de Disney que se celebraba en la ciudad sede de su empresa
Comcast exige una reunión ante el 'mensaje recibido'
Comcast, la empresa que lanzó una opa sobre Disney que fue casi inmediatamente desestimada, hizo un llamamiento a la empresa de entretenimiento para hacerles notar 'el fuerte mensaje que se les había mandado'. Comcast dijo que tras este 'resultado sin precedentes' Disney deben reunirse con Comcast. Eisner se defendió desde el primer minuto de la Junta de los ataques. 'Quiero a esta empresa, el consejo quiere a esta empresa'. Eisner admitió que el resultado de la cadena ABC había sido decepcionante pero prometió enderezarla porque hay 'talento'.