Bush evita concretar medidas costosas en su discurso a la nación
En un discurso sobre el estado de la Unión más ligero de novedades programáticas nacionales e internacionales que años anteriores, el presidente de EE UU, George Bush, evitó ayer hacer propuestas nuevas que impliquen grandes gastos, y no mencionó ni la aventura espacial a la Luna y Marte recientemente lanzada.
Programas para promover la mejora de la educación y la preparación de trabajadores acarrearán unos gastos de menos de 1.000 millones de dólares, según se explicaba ayer desde la Casa Blanca. Sobre las demás cuestiones, la reforma de la Seguridad Social y la atención médica, pasó de puntillas con iniciativas ya propuestas al Congreso, y algunas rechazadas.
Bush pidió que los recortes de impuestos fueran permanentes, advirtiendo que no hacerlo supondrá una subida de la presión fiscal. El coste de esta propuesta sería de un billón de dólares en 10 años. Bush renovó su compromiso de reducir a la mitad el déficit en cinco años ayudado por límites en algunos gastos, aunque prometió un mayor esfuerzo en seguridad.