Las pérdidas en 12 meses han desaparecido casi por completo
Los planes de pensiones en pérdidas han desaparecido casi por completo de la escena y los raros ejemplares que aún presentan caídas en sus precios desde que comenzó el año hasta la fecha rondan la media docena. A punto de cerrar el año, cuando apenas queda un mes para que termine el ejercicio de 2003 y mientras las gestoras se afanan por colocar sus nuevos planes de pensiones, casi todos de tipo asegurado (los partícipes ya no quieren correr riesgos), las rentabilidades de los planes se encuentran en su mejor momento desde el año 2000.
La bonanza afecta, sobre todo, a los planes de renta variable. Aunque representan menos de una quinta parte del patrimonio total gestionado por los planes de pensiones, sus rendimientos a estas alturas del año son bastante notables. Dos planes superan el 30% de rentabilidad acumulada en el año y llega hasta la treintena el número de planes bursátiles con rendimientos por encima de los dos dígitos, situación que mejora sensiblemente la de los tres últimos ejercicios, aunque no ha sido todavía suficiente para compensar a los partícipes de las pérdidas en las que han incurrido durante este periodo de tiempo.
La renta fija, por su parte, no acaba de experimentar el deterioro al que algunos expertos la habían abocado con sus pronósticos. Se mantiene, no obstante, la expectativa de subida de tipos de interés tanto en Estados Unidos como en Europa, pero se está dilatando en el tiempo hasta bien entrado 2004. Hay todavía un rendimiento medio superior al 2% para el conjunto de los planes de renta fija, aunque algunos planes presentan resultados bastante más brillantes debido a sus superiores niveles de riesgo. El más rentable entre los planes de renta fija es un plan especializado en bonos de alta rentabilidad cuya ganancia en lo que va de año se ha situado por encima del 11,6%, si bien en los tres últimos ejercicios este plan había presentado pérdidas medias de casi un 15% a pesar estar orientado a la renta fija privada.