La siderurgia española confía en que EE UU acate la supresión de aranceles

La siderurgia española no las tiene todas consigo. Pese a que la sentencia de la OMC es inapelable y declara ilegales los aranceles al acero nacional, impuestos por George Bush en marzo de 2002, en la industria se comenta que quien se ha saltado las normas de la ONU (con relación a la guerra en Irak) puede transgredir de nuevo el derecho internacional.

Europa daría por bueno el fin del conflicto, sin tener que recurrir a las sanciones comerciales a que tiene derecho, basándose en la sentencia de ayer, que están valoradas en 2.200 millones de dólares (2.525 millones de euros). La Unión Europea tiene ya confeccionada una lista de productos norteamericanos sobre los que efectuar esas represalias, pero prefiere no enfrentarse abiertamente al mayor mercado del mundo. Esa opinión la comparten Japón, Brasil y China, que también denunciaron el bloqueo de EE UU a los aceros planos que llegan del extranjero.

Pérdida de toneladas

La patronal Unesid espera que EE UU actúe ahora de forma rápida y leal

La ilegalidad comercial en la que ahora vive el Gobierno Bush afecta directamente a las fábricas que los grupos Arcelor, Sidenor y GSB tienen en el País Vasco. Arcelor, que produce aceros planos en su filial Aceralia Redondos de Zumárraga, la antigua siderúrgica guipuzcoana Marcial Ucín, ha reconocido que el conflicto le ha restado 600.000 toneladas en exportaciones a EE UU, donde antes de marzo de 2002 vendía un millón de toneladas.

GSB, ahora integrado en CIE Automotive, también es otro de los damnificados, al igual que Sidenor. Este último trasladaba al otro lado del océano Atlántico, antes de marzo de 2002, hasta el 5% de su capacidad total, de 700.000 toneladas. Sidenor, que tiene en Basauri (Vizcaya) una de las mayores acerías de España, rebajó esa ratio al 2% por los aranceles de Bush, que obviamente encarecían esas operaciones.

Con la sentencia de la OMC, la corporación vasca confía en recuperar ese mercado que ahora se demuestra que le fue arrebatado ilegalmente. Tanto GSB como Sidenor venden en EE UU barras de aceros especiales, aunque sus intercambios son de un volumen mucho más pequeño que el de Arcelor.

Estados Unidos también ha visto alteradas sus exportaciones de acero a Europa, pero a mejor, gracias a la caída de cotización del dólar con respecto al euro. En los siete primeros meses de este año las siderúrgicas norteamericanas han colocado en España 135.000 toneladas de bobina en caliente, el 18% de la demanda nacional. En 2002 sólo entraron en el país 11 toneladas en el mismo periodo de tiempo. Las siderúrgicas españolas manifestaron que estos datos demuestran que 'Europa sí que es un mercado libre'.

La patronal siderúrgica Unesid añadió en una nota que confía en que la Administración norteamericana 'actúe de manera rápida y leal, sin que la modificación de las medidas (por parte de la OMC) suponga una extensión del proteccionismo injusto que ha dispensado, en perjuicio tanto de sus consumidores como de nuestra industria'.

Acerinox se salva con su fábrica de Kentucky

Acerinox, líder nacional en acero inoxidable, ha salvado los aranceles de EE UU gracias a la fábrica de aceros planos que tiene en Kentucky.La planta norteamericana de Acerinox tiene una capacidad de 500.000 toneladas, y en dos años espera alcanzar las 800.000 toneladas.Kentucky todavía recibía en 2002 exportaciones de desbastes de su grupo en España, en el año en que George Bush puso en marcha los aranceles al 30% para el acero español, pero ese mismo ejercicio la planta norteamericana consiguió completar una producción integral, con materia prima de Estados Unidos.