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Cierre

Hasbro sostiene que la fábrica de Valencia es 'inviable'

No se pueden reducir costes indefinidamente'. Así de tajante se mostró ayer el director de la fábrica de juguetes MB España -filial de fabricación de la multinacional estadounidense Hasbro- Pat Gilhooly, en unas declaraciones realizadas en exclusiva a Cinco Días. El director de la planta asegura que antes de tomar la drástica decisión de cerrar se analizaron todas las opciones.

'El estudio que nos hizo Ernst & Young analiza diversas opciones para la viabilidad de la planta: la apertura de nuevos mercados, inviable por falta de demanda; el redimensionamiento de la planta, tampoco podíamos acometerlo porque supondría alejarse negativamente del punto de equilibrio, o la reducción de costes, algo que ya se ha efectuado en la factoría de Valencia y no se pueden reducir costes indefinidamente'.

Además, según Gilhooly, la depreciación del dólar respecto al euro se comió gran parte de los esfuerzos realizados para ahorrar costes. La conclusión del estudio de la consultora es que la planta ubicada en Riba-roja de Túria está sobredimensionada para los actuales volúmenes de actividad que solicita el mercado europeo, único mercado objetivo de la producción.

Sin embargo, la planta no llega a los cuatro años de vida. 'Producir es asumir riesgos. En 1999 se apostó por Valencia, y por un mercado que daba signos importantes de expansión. Por desgracia, las tendencias han cambiado drásticamente, haciendo inviable el proyecto', asegura el director.

Las tendencias que han cambiado son las de los juguetes que piden los niños. 'La fábrica de Valencia es competitiva en productos que no requieran un fuerte componente de mano de obra, especialmente figuras de acción de tamaño grande. Sin embargo, el mercado ha variado sustancialmente hacia figuras de tamaño pequeño, con un alto nivel de decoración y fundamentalmente con un gran número de componentes electrónicos', asegura Gilhooly. Y es ahí donde no se puede competir con los productores asiáticos que, según el director de las fábricas de Valencia y Waterford (Irlanda) (la única propia que quedará en Europa), ofrecen 'excelentes niveles de calidad'. Es en China, fundamentalmente, donde Hasbro encargará lo que hace en Valencia. Sobre por qué se optó por cerrar España en lugar de Irlanda, Gilhooly asegura que 'hay una serie de factores que han influido como el tipo de productos fabricados, el mayor volumen de producción en Waterford, las tecnologías empleadas y el alto coste y las consecuencias económicas que tendríamos si trasladáramos otras producciones a Valencia'. Valencia seguirá como sede de la comercial Hasbro Iberia.

La empresa y el comité de empresa empezarán hoy la negociación ante el anunciado cierre de la factoría de Valencia y el despido de 515 trabajadores.

Las cifras

515 es el porcentaje de revalorización del euro respecto al dólar desde que abrió la fábrica, lo que le ha hecho perder competitividad. 42,4 son los trabajadores afectados por el cierre; 289, fijos, y el resto, fijos discontinuos. La media de edad es de 35 años. 40 millones de euros costó la fábrica que ahora se va a cerrar. Los 45.800 metros cuadrados están en venta.

Comisiones Obreras se opondrá al cierre

Los 515 empleados afectados están representados por el comité de empresa que copa CC OO. 'Decimos no al cierre de esta empresa porque no hay ningún motivo justificado', afirma la presidenta del comité, Julia Sorlí. El sindicato considera que la decisión sólo obedece a una intención de 'ganar más' fabricando en China. La delegación sindical, en todo caso, acudirá hoy a la reunión dispuesta a escuchar: 'En esta primera reunión sabremos ya qué nos dicen, pero el comité defiende que no cierre la empresa y lucha por mantener todos los puestos de trabajo', asegura Sorlí. La empresa por su parte asegura que su único interés ahora es alcanzar un plan social 'justo y razonable' mediante negociación. La plantilla de la empresa valenciana tiene una media de edad de 35 años, muchos de ellos tienen relación familiar entre sí y ya trabajaban en la planta antes de la compra de MB (Milton Bradley) por parte de Hasbro en 1999.

MB quiere evitar que la Generalitat intervenga

La fábrica de Hasbro en España funciona formalmente de forma independiente como MB España. Por eso tiene una cuenta de resultados separada. Y estos resultados son positivos. La compañía ganó dinero en los últimos tres años, 1,75 millones en el ejercicio de 2002. Por eso tendrá complicado justificar un ERE ante la Generalitat Valenciana que, en boca de su consejero de Trabajo, Gerardo Camps, ya ha anunciado que exigirá el cumplimiento 'escrupuloso' de las normas que establecen la aprobación del expediente en caso de que se presente. Por este motivo posiblemente la oferta de Hasbro a los empleados sea suficientemente generosa como para lograr un acuerdo que permita llegar a la Dirección General de Trabajo con un expediente pactado. Así la Generalitat Valenciana se limitaría a dar trámite al mismo. Hoy se dará a conocer la oferta. La indemnización global será, a buen seguro, multimillonaria.

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