Calatrava se mide en Nueva York
Santiago Calatrava ha firmado hace unos días un contrato, valorado en 2.000 millones de dólares, para diseñar junto con STV Group y DMJM & Harris el nudo de comunicaciones de metro de la Zona Cero, las ruinas del World Trade Center, conocido como Path. El arquitecto español, entrevistado por The New York Times, que le describe como 'el maestro de las estaciones', aseguraba que está pensado 'en algo grande'. Aunque no ha adelantado ni una pista sobre su proyecto que podría estar acabado entre 2007 y 2009, manifestaba que 'la estación será diferente al resto de las cosas que he hecho. No recuerdo haber trabajado nunca en un centro de una ciudad tan denso'.
Calatrava, que tiene una vivienda en Nueva York y según el diario pasea hasta la monumental Estación Central sólo por el placer de estar allí, dice visualizar esta estación que une Nueva Jersey con la zona financiera de Manhattan como un gran centro cívico abierto 24 horas al día y que mida el pulso de la ciudad. A falta de detalles sobre la futura estación del Path, de la que se estudian en estos momentos las demandas que pueden tener en los próximos 25 años, el diario hace memoria de las obras de Calatrava. Así hace referencia a las curvas sinuosas de sus diseños y a 'algunas formas zoomórficas o antropomórficas', al tiempo que mostraba a sus lectores la estación Oriental de Lisboa y la del aeropuerto de Lyon.
'Tenemos una misión que cumplir, crear espacios interiores de gran calidad, que den la bienvenida a la gente, que tengan un inmediato contacto con la luz', cuenta Calatrava. Y, añade, que se tenga 'la sensación que cuando se encuentren en el andén están en la Zona Cero y que han llegado a la ciudad'.
Las autoridades encargadas de la reconstrucción de este pulmón financiero comparten el entusiasmo del arquitecto, que tiene una obra acabada en la ciudad en el Museo Americano de Historia Natural, pero con algún matiz. Que la vida interior del Path no robe protagonismo a las calles del Bajo Manhattan ni a su comercio. 'Queremos ser tan creativos y visionarios como sea posible', dice Madelyn Wils, presidenta del consejo de la comunidad del Bajo Manhattan, 'pero queremos que estén en las calles, compren y visiten otras áreas'.
La reconstrucción de la Zona Cero de Nueva York es uno de los escaparates arquitectónicos más calientes del planeta. A su carácter de símbolo de una tragedia se le añade el hecho de que Nueva York es una ciudad intensamente cosmopolita y una de las zonas financieras más influyentes del planeta.
Pero la reconstrucción sobre el agujero abierto en el sur de la isla neoyorquina está cargada de problemas. Fue el proyecto del arquitecto Daniel Libeskind el que ganó el concurso de ideas para reconstruir el espacio, pero Larry Silverstein, quien posee el alquiler a largo plazo de la zona, dijo en mayo que Libeskind no construiría la torre asimétrica, corazón de su obra, y lo encargó a otro estudio de arquitectura, Skidmore, Owens & Merrill, que ha planteado otro proyecto.
Arquitecto y artista
Santiago Calatrava, 52. Nacido en 1951 en Benimanet (Valencia), ha desarrollado su vida profesional en sus estudios de arquitectura e ingeniería en París y Zúrich. Aunque está considerado un especialista en el diseño de puentes, famoso el de Valencia, es conocido también por obras como el Pabellón de Kuwait en la Expo 92 de Sevilla y la torre de comunicaciones de Montjuïch (Barcelona). Calatrava, que fue uno de los arquitectos seleccionados para reformar el Parlamento alemán (Reichstag), ha trabajado en el proyecto de la Estación de Oriente (Lisboa).