Los chascarrillos de Berlusconi

Marx, Freud, Trichet, Solana y Berlusconi. Silvio Berlusconi volvió a campar por sus fueros ayer, al final de la cumbre comunitaria. El primer ministro italiano y presidente de turno de la UE regó su intervención de chascarrillos, anatemas contra el comunismo, hagiografías del Papa y lapsus sobre los acuerdos tomados. Al nuevo presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, lo felicitó por su supuesto nombramiento como presidente del BEI. A Karl Marx lo resucitó como protagonista de un chiste con el que ilustrar la brevedad de la que deben hacer gala los líderes europeos para trabajar en una Unión a 25. A Javier Solana le quita el adjetivo de su cargo Alto Representante, 'porque mides poco más o menos como yo, 1,70, y a mí me llaman enano en Italia'. Romano Prodi, presidente de la Comisión, apostilló las intervenciones de su probable rival en las próximas elecciones en Italia. 'Más que a Marx, hace falta resucitar a Freud'.

Halliburton, enmarañada en la sospecha. La empresa liderada en el pasado por el actual vicepresidente de EE UU, Dick Cheney, fue muy criticada por ganar contratos multimillonarios en Irak sin mediar concurso público. Ahora los demócratas la acusan de importar petróleo con una recarga de precio entre 65 y 75 centavos por galón, sobreprecio que pagan los contribuyentes. Mientras el Congreso discute la ayuda a Irak, legisladores demócratas han revelado, además, que EE UU subsidia el 90% la gasolina que se consume en Irak.