Navegar ya no es cosa de unos pocos
Antes y después del verano. Estos son los dos momentos del año que concentran el mayor número de solicitudes para optar a las titulaciones que permiten patronear barcos; durante las vacaciones el mar engancha y son muchos los que deciden examinarse para, quizás un día, poder estar a la caña de un velero. La cosa ya no es tan inasequible, pues numerosas empresas han descubierto en el alquiler de barcos, con o sin patrón, un buen filón.
Y también crece la oferta de escuelas de navegación que preparan para los exámenes. Como las autoescuelas del mar. En España hay más de 300, y junto a los centros más conocidos y tradicionales abren sus puertas otros nuevos. En el sector se calcula que el 65% del alumnado acude a escuelas homologadas para examinarse.
Tras muchos años de experiencia, José Luis Bolacho, director de la escuela CEN El Cano, asegura que, 'a lo largo de todo este tiempo de trabajo, más que los cambios sufridos en la metodología docente, ha sido llamativa la evolución de la demanda. Cada vez hay más gente interesada, de ahí que cada vez se abran más escuelas. Antes se consideraba una titulación elitista, pero desde la década de los ochenta, al aumentar el poder adquisitivo, se ha dejado de ver como algo caro; además la actividad se puede desarrollar adquiriendo o alquilando la embarcación, lo que facilita el acceso'.
Desde el centro de actividades náuticas Avante también constatan esta demanda creciente. En esta escuela llevan preparando los exámenes oficiales dos años, 'y en este tiempo ya hemos conseguido hacernos con una parte importante del mercado, lo que refleja que hay demanda y, por tanto, hueco', comenta Alfonso Jordana, su director.
'A diferencia de otros países', explica Jordana, 'en España, a pesar de la tradición costera y de tener mucho litoral, este interés responde más a una expectativa o un deseo que a una realidad de navegación; por eso los puertos suelen estar llenos de barcos, pero el mar vacío'.
Ambas escuelas preparan los exámenes de las cuatro titulaciones existentes. Los títulos que, con un nivel progresivo de complicación, capacitan para los diferentes tipos de navegación y embarcación, tanto de vela como de motor, son cuatro: patrón de navegación básica, patrón de embarcaciones de recreo -que acapara el 70% de las solicitudes-, patrón de yate y capitán de yate.
El temario varía para cada una de ellas, y mientras patrón de navegación básica y de yate tienen cinco asignaturas, patrón de recreo incluye ocho y capitán de yate cuatro (lo que es independiente de la complicación de los contenidos). 'Estudiando unos dos meses y medio cuatro horas semanales se suele estar listo para las pruebas', indica el director de Avante.
Además de la teoría, las titulaciones requieren unas prácticas de seguridad y navegación que deben ser certificadas por los centros de enseñanza homologados.
Los exámenes son oficiales y dependen de la Dirección de Marina Mercante y de las comunidades autónomas, pues éstas tienen transferidas las competencias. No obstante, las comunidades de interior no las han asumido.
Para obtener la titulación suele haber unas tres convocatorias anuales. Una vez tomada la decisión, y antes de ponerse a estudiar el temario exigido, el interesado tiene dos opciones: hacerse con la materia y prepararse por libre (los temas se publican en el BOE y también puede recurrirse a librerías náuticas) o matricularse en un centro docente.
Cuatro títulos para cuatro barcos
Patrón de navegación básica (PNB) habilita para el gobierno de embarcaciones de motor hasta de seis metros de eslora y ocho metros de vela y permite la navegación hasta una distancia de cuatro millas de la costa. El coste del curso de PNB oscila entre 170 y 250 euros, según escuelas.Patrón de recreo (PER) sirve para conducir barcos que midan hasta 12 metros de eslora y otros 12 metros de vela. Los límites en las distancias de navegación son los mismos que las del PNB, pero incorpora la interinsular. Su coste va de 450 a 700 euros. Patrón de yate es la única categoría que exige estar en posesión de la titulación precedente (PER) como requisito. Capacita para patronear embarcaciones que medirán hasta 20 metros de eslora (y 12 de vela como tope general). En este caso, el límite de navegación llega a 60 millas de la costa. La inversión que requiere se cifra en unos 570 euros como mínimo y 750 euros como cantidad máxima.Capitán de yate supone un escalón considerable respecto a los anteriores, sobre todo por la mayor dificultad que presentan los contenidos del temario. El título posibilita la navegación libre, sin limitaciones ni en las medidas de la embarcación ni en la distancia con respecto a la costa. Su precio, a partir de 1.500 euros.