Rajoy promete a Cuevas bajar las cotizaciones en empleo femenino
La primera queja de José María Cuevas la escuchó el presidente del Gobierno a primera hora de la mañana, cuando asistía en La Moncloa a la creación de la comisión de seguimiento del Fondo de Reserva de la Seguridad Social. Delante del ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, y de los dos principales sindicatos, el jefe de la patronal reprochó a su anfitrión el incumplimiento del compromiso de reducir las cotizaciones, en contra de lo previsto en el acuerdo sobre pensiones firmado con el Ejecutivo y Comisiones Obreras en 2001.
Horas después de esta cita, Cuevas trasladaba el mismo recordatorio al candidato del PP, en esta ocasión a puerta cerrada y en la sede de la patronal, donde mantuvieron una primera toma de contacto que Rajoy aprovechó para hacer sus pinitos en el discurso económico. Cuevas extrajo de esta reunión el compromiso del candidato de promover en el futuro una nueva rebaja selectiva de las cotizaciones sociales orientada a fomentar el empleo femenino.
La CEOE expuso a Rajoy su modelo ideal de reforma laboral, sin llegar a pedir expresamente el abaratamiento del despido, aunque sí lo sugirió. El candidato del PP se limitó a tomar nota, pero advirtió que para él será prioritario el mantenimiento de la paz social y, por lo tanto, los avances en este terreno estarían sometidos al diálogo con los sindicatos. 'Hay que trabajar con consensos', le resumió Rajoy a Cuevas.
'Hay que trabajar con consensos', le dijo Rajoy a Cuevas cuando le planteó su reforma laboral ideal
La reunión fue coronada con la promesa expresada por el candidato a la patronal de que si gana las elecciones de marzo tendrá una 'interlocución clara y solvente' con el Gobierno y también con la invitación a Cuevas de que le remita sugerencias ahora que el partido trabaja en la elaboración del programa electoral.
Rajoy también detalló a la cúpula empresarial su visión del conflicto vasco y la emplazó a ser más activa en la crítica al plan soberanista que defiende el lendakari Ibarretxe.
Todas las familias, en Diego de León, 50
Rajoy acudió ayer bien escoltado en su primera visita a la sede de CEOE de la calle Diego de León. Le acompañaron el portavoz de economía del PP, Vicente Martínez Pujalte, un hombre de probada lealtad al vicepresidente Rodrigo Rato y al ministro Eduardo Zaplana; el coordinador del programa electoral y número dos de Administraciones Públicas, Gabriel Elorriaga, una persona cercana a José María Aznar y al propio candidato del PP; y el secretario de participación ciudadana del partido, Julio Sánchez Fierro, antiguo alto cargo de la CEOE, que ha hecho su recorrido político ligado al del actual vicepresidente segundo, Javier Arenas.Cuevas se estrenó ante el candidato del PP junto a 10 de los 11 vicepresidentes de la patronal. Ninguno de ellos se permitió sondear a Rajoy sobre la composición de su futuro equipo económico y mucho menos sobre la posible continuidad o no de Rodrigo Rato en el Gobierno. En cambio no tuvieron inconveniente en plantearle reivindicaciones sectoriales relacionadas con la industria turística, los problemas derivados de la política agrícola común y las dificultades para invertir en investigación.Esta primera inmersión de Rajoy en el ámbito empresarial tendrá continuidad en los próximos días de la mano del Círculo Catalán de Economía y de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES).