El presidente de la CECA reivindica la autonomía de las cajas frente al poder político
El presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), Juan Ramon Quintás, ha subrayado hoy en Barcelona que "parte del modelo de éxito de las cajas" se fundamenta en que los órganos de gobierno de éstas "tengan autonomía frente al poder público".
Quintás se refirió así ímplicitamente a la polémica suscitada en Caja Madrid por la renovación de sus órganos de dirección y aseguró que es necesario que dichos órganos "supediten sus intereses con los globales" de la sociedad, a la que deben servir, según Quintás. En este sentido, afirmó que "las cajas han languidecido" cuando han perdido su autonomía.
Sin embargo, el presidente de la CECA reconoció como "positivo" que haya representación de miembros de corporaciones locales y autonómicas en los órganos directivos de las cajas. "El problema fue la extremada generosidad de algunas Comunidades Autónomas, que se autorepresentaron con más del 80 por ciento de miembros".
Quintás, que hizo estas declaraciones durante una mesa redonda sobre los retos de las cajas de ahorro organizada por el Instituto de Economía de Barcelona, mostró su satisfacción por la reducción al 50 por ciento de la presencia de políticos en los órganos de las cajas como consecuencia de la aprobación de la Ley Financiera.
Menos sillas
El presidente de la CECA atribuyó el problema en la designación de los órganos de gobierno de algunas cajas a que "hay menos sillas donde sentarse" y a la proximidad de las elecciones. En este sentido, reclamó que los órganos de gobierno "estén regidos por los objetivos de la caja", que es dar respuesta a la sociedad.
Asimismo, Quintás explicó que es "peligroso" en la medida en que los que no son profesionales "se ponen a jugar" y también extendió este problema a la representación de los empleados en los órganos de gobierno de las cajas.
"Me asustaría una caja en la que los empleados estuvieran representados en un 40 por ciento", afirmó Quintás, quien dijo que sería "una aberración" porque este colectivo no representa el 40 por ciento de los objetivos de las cajas.
El presidente de Caixa Catalunya, Antoni Serra Ramoneda, apostó por la "biodiversidad" en los órganos de gobierno de las cajas y alertó de que el peligro de éstas es "morir de éxito". "Las cajas han triunfado y el triunfo despierta apetencias", afirmó Serra Ramoneda, y añadió que el segundo "peligro" al que se enfrentan es que "se conviertan en cooperativas".