La buena racha bursátil
La Bolsa española cerró agosto con un avance modesto (el Ibex ganó un 0,7%) que, sin embargo, fue suficiente para encadenar el quinto mes consecutivo al alza. Se consolida así la racha alcista más prolongada desde 1999, antes de que estallase la burbuja bursátil, y renace el debate sobre si ha quedado o no atrás definitivamente la purga iniciada en la primavera de 2000.
El consistente rebote de las acciones desde los mínimos de marzo se produce después de un periodo marcado por factores extraordinarios (como los escándalos contables de EE UU y la guerra en Irak) que inhibieron notablemente las decisiones inversoras. Tras la ocupación de Irak, y a pesar de lo conflictivo de la posguerra, los inversores parecen haber recobrado el buen ánimo y quienes esperan una mejora del entorno macroeconómico son ahora mayoría. Los expertos siguen recomendando cautela y los volúmenes de negociación son bastante modestos, pero las Bolsas parecen estar descontando ya una pronta recuperación económica de la que ya da señales EE UU. Mucho menos clara está la situación de Europa, con media UE en recesión. Pero, a menos que tengan razón quienes hablan de que asistimos a una 'burbuja de las expectativas' (que no se correspondería con la realidad macroeconómica), caben motivos para la esperanza.
Los inicios de periodos expansivos suelen ser titubeantes. Y todo apunta a una recuperación económica en los próximos trimestres, aunque no sea tan robusta como algunos esperaban hace unos meses.