El presidente de Inmocaral rebaja un 20% su participación
Francisco Carrasco Alba, presidente de Inmocaral, ha pasado a controlar el 72,51% de la sociedad, de la que poseía el 92,81%. La reducción de participación en un 20,30% es resultado de la ampliación de capital concluida este mes de agosto a la que no ha acudido el presidente de la compañía, según confirmaron en Beta Capital, entidad agente de la ampliación.
El pasado día 8 concluyó una ampliación de capital en Inmocaral por valor de 25,15 millones de euros, de los que 21,6 millones corresponden a prima de emisión. El importe nominal de la ampliación ha sido de 3,55 millones de euros, con lo que el nuevo capital social de Inmocaral es de 16,23 millones de euros.
La ampliación ahora concluida fue autorizada por la junta general de Inmocaral celebrada el pasado 8 de abril. En el consejo de administración de 28 de abril, las sociedades a través de las que Carrasco controlaba el 92,81% de la inmobiliaria comunicaron que no tenían la voluntad de suscribir las nuevas acciones objeto de la ampliación. Este compromiso fue ratificado en un consejo posterior celebrado el pasado 10 de julio y está en línea con la voluntad de dilución de participación del presidente y accionista mayoritario de la inmobiliaria.
El control por Francisco Carrasco de Inmocaral se realiza a través de la sociedad holandesa Sandobella Holding, de Parkfield Trading Limited y de La Constructora Moderna Barcelonesa. El año pasado, esta última sociedad aportó a Inmocaral su rama de actividad y Parkfield Trading Limited aportó un solar en la ampliación de capital aprobada en junta de 12 de diciembre de 2001 y ratificada en la junta general de 9 de abril de 2002. La totalidad de estos inmuebles se pondrán previsiblemente a la venta por Inmocaral en el periodo 2003-2006, según la estrategia de futuro diseñada para la compañía, basada en la rotación de su patrimonio.
En cuanto a la política de dividendo (Inmocaral ha pagado un dividendo con cargo al ejercicio 2002 por un importe de 2,74 millones de euros) la sociedad prevé retener una parte significativa de los beneficios que se generen, en su caso, en los ejercicios 2003-2006 para financiar importantes compras de patrimonio. En consecuencia, prevé pagar dividendos no superiores a un rango del 12% al 20% del resultado alcanzado en cada ejercicio.