_
_
_
_
EE UU

Bush descarta más recortes fiscales para animar la economía

Aunque los principales organismos internacionales, como el Fondo Monetario Internacional (FMI), la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) o la Comisión Europea, aseguran que la recuperación económica está en marcha, las principales potencias no lo tienen tan claro.

En sendas reuniones celebradas ayer con sus respectivos equipos, Bush y Schröder analizaron la marcha de sus economías y el alcance de la recuperación, aunque los puntos de partida de cada uno de estos países es muy diferente.

El presidente de EE UU convocó a todo su equipo económico, liderado por el secretario del Tesoro, John Snow, a su rancho de Texas. Tras el encuentro, Bush se mostró 'optimista sobre la creación de empleo' y aseguró que están dadas las bases para un 'sano crecimiento económico', lo que hace innecesarias nuevas rebajas fiscales.

El paro alcanza al 6,2% de la población y el déficit público previsto para este año asciende a 455.000 millones de dólares. Eso ha llevado a que el apoyo a Bush haya caído 18 puntos desde abril, hasta el 59%, según una encuesta de The Washington Post, y que sólo el 45% de los ciudadanos apruebe su gestión económica.

Los demócratas acusan a Bush de aplicar 'la peor política económica en la historia del país', según el Nobel de Economía George Akerlof, y de dilapidar los recursos públicos con rebajas fiscales para ricos.

El presidente asegura que 'hemos hecho absolutamente lo correcto' y que 'la rebaja fiscal puesta en marcha es lo suficientemente robusta para animar la creación de empleo', por lo que consideró innecesarios nuevos recortes.

Asimismo, aseguró que 'la otra cosa que necesita la economía es asegurarse que hay disciplina presupuestaria' en el Gobierno, su principal promesa tras la reunión de ayer.

Bush celebró en agosto del año pasado una reunión económica con la presencia de ejecutivos empresariales y expertos financieros para discutir los contenidos del programa económico que, a su juicio, daría paso a la gran recuperación. Doce meses después, las señales de recuperación de la economía de EE UU son claras, pero los riesgos también se perciben con nitidez.

El Departamento de Comercio informó ayer que las ventas minoristas crecieron el 1,4% en julio. El dato superó las previsiones de Wall Street y animó las expectativas de una sólida recuperación en EE UU. Pero lo cierto es que ese optimismo sobre la recuperación económica se está moderando ante el alza de los tipos de interés a largo plazo y el fuerte desempleo que asuela a la primera economía mundial.

Muy distinta es la situación del canciller Gerhard Schröder. El Gobierno alemán puso ayer fin a las vacaciones estivales con la aprobación de la reforma de desempleo, por el que recorta las prestaciones a los parados, y la rebaja fiscal anticipada para 2004.

Aunque hoy se conocerán los primeros datos oficiales del crecimiento en el segundo trimestre, el ministro de Economía y Trabajo, Wolfgang Clement, admitió ayer que el comportamiento de la economía fue negativo en el segundo trimestre. Los analistas estiman una contracción del PIB del 0,1% entre abril y junio, lo que llevaría a Alemania a su segunda recesión en apenas dos años después de la caída del PIB un 0,2% en el primer trimestre.

æpermil;se es el escenario al que Schröder pretende imprimir un giro de 180 grados con su plan de reformas, denominado Agenda 2010. Para ello necesitará el apoyo de la oposición, que se encuentra atada hasta el 21 de septiembre por la celebración de elecciones en Baviera, donde el líder democristiano, Edmund Stoiber, busca la reelección como presidente regional.

'Somos conscientes de que necesitamos al Bundesrat (Cámara alta), pero creo que a más tardar después de las elecciones regionales habrá posibilidad de entablar un diálogo racional', dijo ayer Schröder.

Más información

Archivado En

_
_