Gotas optimistas

El tan esperado comunicado de la Reserva Federal, que ayer mantuvo los tipos de interés en el 1%, dio de sí. En sus apenas catorce crípticas líneas deja algo claro: que los tipos se pueden mantener en el actual nivel por un periodo considerable de tiempo. Es un mensaje que quiere dar confianza a las empresas y estimular su inversión. Sin embargo, habrá que interpretarlo mejor a la luz del dato de inflación de julio que se publicará el viernes, porque la Reserva sigue viendo riesgos de deflación. El mensaje de Greenspan también intenta quitar tensión a la curva de tipos a largo plazo. Desde luego, sin presiones de encarecimiento del dinero a corto plazo, la economía podrá retomar la reactivación más fácilmente. La Reserva Federal se muestra optimista sobre la evolución del consumo y la productividad, aunque considera que el mercado laboral sigue dando señales mixtas, es decir, contradictorias. Alan Greenspan renueva así sus previsiones para la recuperación en el segundo semestre del año, como hizo el BCE para la zona euro y los indicios de la coyuntura corroboran. Es de esperar que esta vez acierten.