Mercados y analistas renuevan su apuesta por Latinoamérica

La Bolsa española ha tomado este año la delantera de los mercados europeos, sólo superada por Fráncfort. El Ibex suma un 13,76% desde enero, ligeramente por debajo del Dax, que gana el 14,2%, pero muy por encima del avance del resto de índices.

A juicio de los expertos, la mejora relativa del mercado español se debe en gran medida a la calma relativa en Latinoamérica, sobre todo en Argentina y Brasil, donde las principales empresas del Ibex tienen elevada exposición. De hecho, los cinco valores que más han influido en la mejora del índice en el año tienen intereses en la región: Telefónica, con un alza del 22,58% desde enero; SCH, un 17,74%; Endesa, el 26,01%; Repsol, un 11,67%, e Iberdrola, un 11,99%. Sólo las tres primeras son responsables del 60% de la subida del Ibex en el ejercicio. La menor inestabilidad, en un contexto de incertidumbre mundial, se refleja tanto en las Bolsas como en las divisas de la región. En Argentina, el Merval sube el 43% desde enero y el peso ha pasado de 3,38 a 2,77 unidades por dólar. São Paulo suma el 22% en el año y el real se ha revalorizado más del 20%. México, por su parte, suma el 18% y Venezuela, un 82%.

Optimismo moderado

'Lo peor de la situación latinoamericana ya ha pasado', dice Mercedes Camacho, de Safei. 'El sentimiento tras los últimos datos económicos es de mejora y ligero aumento de la confianza, en la medida en que ha disminuido sustancialmente la tensión geopolítica', afirma. Así, a juicio de esta experta, la menor incertidumbre puede favorecer la recuperación de estos países, ya que se reduce un desincentivo para las inversiones.

El optimismo lo reflejan también los expertos de Caja Madrid. 'En un contexto internacional todavía caracterizado por la incertidumbre, América Latina se está viendo beneficiada por el excesivo castigo que experimentaron sus mercados en 2002, por la ortodoxia de la mayoría de políticas económicas y por la confianza que sigue transmitiendo Lula', afirman.

La recuperación de la confianza es más clara en Brasil, donde ya se empiezan a ver las reformas del Gobierno de Lula. 'Brasil está cumpliendo muy bien las perspectivas', afirma Juan María Soler, gestor de Sabadell Banca Privada (SBP), quien subraya el recorte de los niveles de riesgo en el país. Mayor incertidumbre se vive en Argentina, donde el Gobierno de Kirchner 'tiene todavía que definirse'. No obstante, la tensión con los empresarios en su reciente visita a Madrid no supone, de momento, una amenaza. 'Kirchner parte de una situación en la que tiene que ir ajustando las medidas', dice este experto. 'Sólo en el caso de que se tomaran resoluciones muy drásticas, sí podría afectar a las empresas españolas', indica.

En cualquier caso, Caja Madrid destaca como punto a favor que Argentina 'ha consolidado la estabilización económica y empiezan a aparecer síntomas claros de reactivación'.

Brasil hace los deberes y afianza los lazos

Brasil es el país que mejor ha hecho sus deberes, según los analistas. Si hace unos meses la llegada de Lula al poder se consideraba un peligro para la estabilidad del país e incluso de la región, ahora las opiniones son justo al contrario y se suceden las alabanzas a las reformas del nuevo Gobierno (pensiones, sistema fiscal y autonomía del Banco Central). Además, hay interés en reforzar los lazos con las empresas españolas. 'La visita de Lula a España ha sido muy fructífera', dice Mercedes Camacho, de Safei.

Pendientes del nuevo Gobierno argentino

Los expertos muestran cautela con la evolución de Argentina, pendientes de las medidas del nuevo presidente Néstor Kirchner. El mandatario viajó a EE UU, donde se entrevistará por primera vez con George Bush en busca de apoyo a su política económica y posibles acuerdos con el FMI. El Ejecutivo argentino también ha mostrado su intención de renegociar contratos con las empresas españolas. Según Juan María Soler, de SBP, las negociaciones tienen que ir desarrollándose para empezar a realizar conclusiones.

Gobierno argentino México sufre el frenazo estadounidense

La economía mexicana, muy ligada a la de Estados Unidos, continúa caracterizada por la debilidad. Los analistas de Caja Madrid aseguran que la contracción del PIB en el primer trimestre (-0,5%) ha reducido las expectativas y difícilmente se alcanzará este año el 2%, frente al 2,5% estimado a finales de 2002. 'Se notan los efectos del frenazo estadounidense, de las políticas monetaria y fiscal restrictivas y del parón legislativo (antes de las elecciones)'. El índice Mexbol, con todo, sube cerca del 18% en el año.