Cepsa da entrada a la argelina Sonatrach en su filial de gas
La internacionalización y la diversificación son las claves del aumento de resultados de Cepsa y de la estrategia de crecimiento cara al futuro. Y Argelia es uno de los ejes centrales de la petrolera española controlada por la francesa Total y el SCH, que hoy celebra junta de accionistas.
Ahora Cepsa ha dado entrada en su filial de comercialización de gas a la argelina Sonatrach, que contará con una participación del 30%; la compañía que preside Carlos Pérez de Bricio se queda con un 35% y la francesa Total, con otro 35%. La citada filial, que se dedica a la venta de clientes fuera de tarifa, tiene actualmente un cuota del mercado liberalizado del 8%. Y Sonatrach, una de las empresas con mayores reservas de gas del mundo, busca aumentar su penetración en los países con elevado consumo.
En paralelo, según anunció ayer Pérez de Bricio, avanza el proyecto de construcción de un nuevo gasoducto entre Argelia y España, sin atravesar Marruecos, en el que participan, además de Cepsa y Sonatrach, empresas como la italiana Eni, Total y Gaz de France. Este gasoducto, que estará operativo en el año 2006, es un proyecto paneuropeo, por lo que otro tema, que ahora se estudia, es la zona por donde se conectará con Francia. Pérez de Bricio destacó que la nueva red, al reducir la longitud del trazado desde Argelia, permitirá un ahorro de costes y espacialmente para los consumidores del arco mediterráneo. En esta línea añadió que los datos actuales muestran que el proyecto es viable y así la sociedad promotora se constituirá en los próximos meses.
No obstante, el presidente de Cepsa indicó que el gas es la 'asignatura pendiente' de la petrolera, mientras que la toma de posiciones más fuertes en electricidad vendrá 'en su momento'.
Bagdad
En Irak está dispuesta a participar en las oportunidades de negocio que surjan cuando el país se calme. Pérez de Bricio recordó la tradicional presencia de la petrolera en en ese país que cuenta, a su juicio, con un crudo de elevada calidad. Añadió que el director de aprovisionamiento del grupo se encuentra actualmente en Bagdad analizando los posibles negocios, que se enfrentan todavía a obstáculos como el caos en el que ese país está inmerso. Pero reiteró que Irak tiene un potencial muy elevado y Cepsa no perderá oportunidades. La base internacional de Cepsa se completa con Canadá. Allí, según adelantó Pérez de Bricio, entrará próximamente en operación la nueva planta de Interquisa, en la que también participa la Sociedad General de Financiación del Gobierno de Quebec. La factoría tiene capacidad de producción de 500.000 toneladas de PTA (materia prima para la fabricación de poliésteres), que se destinarán a los países del Nafta (EE UU, Canadá y México).
Pérez de Bricio resaltó asimismo su interés por adquirir una participación en la compañía logística portuguesa CLC, para lo que mantiene contactos con Galp.
Hasta 2007 la petrolera prevé invertir 2.400 millones en refino, yacimientos, petroquímica y red, así como en gas y electricidad.
El beneficio crece un 60% hasta mayo
Cepsa, segunda petrolera del mercado español, alcanzó un beneficio neto de 294 millones de euros en los cincos primeros meses del año, cifra que supone un aumento del 60% en relación al mismo periodo de 2002, según manifestó Carlos Pérez de Bricio. El beneficio bruto alcanzado hasta mayo fue de 431 millones, de los que 151 millones corresponden a la producción de petróleo; 188 millones, a refino y distribución; 90 millones, a la de petroquímica (básica y derivada), y 5 millones, a la de electricidad. La deuda bajó hasta 1.100 millones de euros, frente a los 1.254 millones de media neta en 2002. El coste financiero del endeudamiento en 2003 fue del 2,2%. Los resultados de 2003, sin ser extrapolables los logrados a mayo, serán superiores a los de 2002.