Caos en los transportes franceses y austriacos por las huelgas contra la reforma de pensiones
En torno al 80% de los vuelos con salida o llegada a los aeropuertos franceses ha sido anulado hoy, según anunció la Dirección General de la Aviación Civil (DGAC), de la que dependen los controladores aéreos y donde dos sindicatos han depositado un aviso de huelga hasta el jueves. Roissy-Charles de Gaulle y Paris Orly presentan una reducción de vuelos del 75 y 70%, respectivamente.
La huelga ha obligado a cancelar o retrasar numerosos vuelos en España, según informó Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA). Como en jornadas anteriores, ha habilitado dos rutas alternativas en colaboración con los centros de control de los restantes afectados y las aerolíneas. En cuanto al tráfico ferroviario, la estatal SNCF prevé que circulen uno de cada tres trenes de alta velocidad (TGV) y regionales. Los transportes públicos en París, que también comenzaron los paros anoche, funcionan de forma bastante irregular y depende de la línea, pues sólo convoca uno de los sindicatos de la RATP. En cuanto a las provincias, han convocado preavisos de huelga en los transportes urbanos de 54 ciudades y en 33 son prorrogables.
El día de hoy se interpreta como un test decisivo en el pulso que mantienen el Gobierno y los sindicatos a propósito de la reforma de las pensiones, que contempla básicamente ampliar el periodo de cotización a 42 años en el horizonte de 2020 para poder hacer frente a los cambios demográficos. El grueso de la batalla lo ha dado por ahora el sector público, por lo que una de las incógnitas del día es saber si los sindicatos lograrán movilizar también a los asalariados del privado.
Sector educativo
El sector de la educación vive su décima jornada de huelga desde que comenzó el curso, pese a que París ha decidido aplazar al que viene la presentación de las reformas de la descentralización y de la autonomía de las universidades, dos de las principales causas de controversia.
En Austria, todo el sistema educativo, el transporte público (desde los ferrocarriles a los autobuses o metro) y la mayor parte de los servicios públicos se han sumado a la huelga convocada por la poderosa federación de Sindicatos Austríacos (OeGB) en protesta por la reforma de las pensiones. Hoy moviliza a más de un millón de los ocho millones de austríacos y paraliza la vida laboral de la República alpina.
A la huelga se han sumado centenares de empresas privadas, pero también cuerpos de seguridad como la Policía o la Gendarmería, esta última responsable de las aduanas, lo que ha paralizado el tráfico de mercancías con los países vecinos del Este europeo. El paro de hoy es muy superior al convocado el 6 de mayo y se produce tras el fracaso de las negociaciones en la mesa redonda convocada por el presidente Thomas Klestil, y en la que hasta el pasado miércoles trataron de llegar a un acuerdo Gobierno, patronal y sindicatos.