La Reserva Federal seguirá los pasos de Europa
Los expertos consideran que Estados Unidos también se verá obligado a recortar los tipos de interés, aunque en esta ocasión todo indica que Banco Central Europeo actuará primero. Las palabras de la semana pasada del presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, confirmaron esta tesis, a la vez que se descartaba el temor a una intervención inmediata. El consenso no espera una actuación anterior a la reunión de la autoridad monetaria prevista para el próximo 25 de junio.
Las especulaciones se centran ahora sobre la dimensión del recorte. Las últimas apuestas no descartan una rebaja de medio punto porcentual desde la tasa del 1,25% actual.
Optimismo
Greenspan, siguiendo su tónica habitual, volvió a lanzar un mensaje muy ambiguo. Reconoció que la economía estadounidense sigue en terreno incierto, pero reiteró que continúa teniendo fundamentos sólidos para el futuro crecimiento. 'La mayoría del mercado considera que la intención del último mensaje fue infundir optimismo sobre la recuperación. Quizá más lenta e indecisa de lo deseable, pero al fin y al cabo recuperación', explica José Luis Martínez de Citigroup.
El presidente de la Reserva Federal volvió a advertir sobre el peligro de la deflación (descenso general y continuado de los precios), aunque señaló que no es un peligro inminente. 'En el fondo todo apunta a que sin la presión que impone el riesgo de inflación, la Reserva Federal mantendrá su actual política monetaria acomodaticia más tiempo de lo que esperan los mercados. Y la curva de tipos descuenta que las primeras subidas de tipos oficiales se producirán en la primera mitad del próximo año' añade Martínez.