Los expertos prevén caídas en las Bolsas si el BCE baja los tipos de interés más de un 0,5%
Los analistas no dudan de que el BCE bajará los tipos de interés el 5 de junio. La incógnita radica en la magnitud del recorte y las apuestas oscilan entre una rebaja del 0,25% al 0,5% de la actual tasa del 2,5%.
'Hace un mes había probabilidades, pero ahora, viendo como están el euro y el dólar, es seguro', explica Ramón Carrasco de Beta Capital. Morgan Stanley coincide con este razonamiento. El banco preveía un recorte de un cuarto de punto, pero la semana pasada cambió su pronóstico a una rebaja de medio punto en junio seguida de otro cuarto de punto en la segunda mitad del año.
La mayoría de los expertos reconoce que una bajada de medio punto sería necesaria e incluso insuficiente dado el contexto económico actual, aunque muchos descartan que la autoridad monetaria agote tantos cartuchos de golpe, especialmente teniendo en cuenta el perfil duro que le caracteriza. 'El BCE es muy estricto a la hora de usar la política monetaria como medida incentivadora de la economía', explica Jordi Falgueras, de Gaesco Bolsa.
La fuerte apreciación del euro y el estancamiento económico en Alemania, Italia y Holanda dejan pocas opciones al BCE. 'Está obligado por las circunstancias, y si no baja los tipos mostraría una ceguera tremenda', explica Pedro Mirete, de Ahorro Corporación. 'La política monetaria actual resulta muy restrictiva dadas las condiciones económicas. Si el euro y el dólar estuvieran en paridad, quizá el tipo de cambio actual sería conveniente', añade.
Combatir la subida del euro
Un euro fuerte daña a las empresas exportadoras, ya que éstas ingresan menos al efectuar sus ventas en dólares. Goldman Sachs publicaba recientemente que por cada caída del dólar del 10% las empresas exportadoras reducen sus ingresos alrededor del 4% de media. En lo que va de año, el euro se ha apreciado cerca del 13%.
Una bajada de tipos es una manera de combatir esta escalada. En la actualidad, el precio del dinero en Europa se encuentra en el 2,5%, frente al 1,25% de EE UU. Esta diferencia ayuda a atraer inversores extranjeros, seducidos por la mayor rentabilidad que pueden obtener en Europa y por el atractivo que tiene una moneda que tiende a apreciarse. Un círculo que frena la inversión europea hacia EE UU y a su vez acelera la subida del euro. Al bajar los tipos y reducir el atractivo de la región se puede suavizar la subida de la moneda única.
El menor riesgo de inflación también facilita la posibilidad de un recorte de tipos. Actualmente ésta se encuentra en el 2,1% en Europa. Alemania, por otra parte, además de ser el motor económico de la región y de verse muy afectada por su perfil exportador, se enfrenta más bien a un riesgo de deflación. El Bundesbank alertaba recientemente sobre el estancamiento del país.
Dado el contexto actual, el mercado espera un recorte de tipos de interés. Los expertos dibujan diversos escenarios en las Bolsas dependiendo de la magnitud de la rebaja. Los analistas coinciden en que la peor consecuencia para los mercados y motivo de importantes caídas ocurrirá en caso de que el BCE no altere los tipos de interés. 'El mantenimiento sería muy malo para las Bolsas', explica Falgueras. Otros incluso hablan de desplome por la decepción que causaría en el mercado.
Las opiniones sobre la reacción de la Bolsa a un recorte de tipos son también variadas, aunque la mayoría considera que en un principio las Bolsas reaccionarán al alza. 'Un recorte será bien acogido si eso implica que el dólar vuelva a niveles más normales', señala Carrasco.
Los más cautos no descartan que las caídas bursátiles tarden poco en regresar. 'Una bajada no debería llevar a un rally en Bolsa, porque en realidad el BCE está diciendo que un euro fuerte no compensa demasiado', indica Luis Vidal, de Sabadell Banca Privada. La mayoría de los expertos coincide en que un recorte de tipos de interés superior al 0,5% también tendría una lectura muy negativa. 'Los inversores pueden entenderlo como que las cosas siguen fatal', explica Mirete.
Finalmente, los que apuestan por una rebaja del 0,5% consideran que el mercado se mostrará insatisfecho si la bajada de tipos resulta inferior. Wall Street también marcará tendencia y el mercado seguirá atento a los indicadores económicos una vez descontados los efectos de la guerra en Irak.
Rentabilidad cada vez menos atractiva en los bonos
En las últimas semanas se está viviendo un escenario inusual en los mercados. La rentabilidad de la deuda (cuyo precio se mueve a la inversa) y las acciones evolucionan en direcciones opuestas. En los últimos años una subida de la Bolsa generalmente ha provocado a su vez una caída de los precios de la deuda, o lo que es lo mismo, una subida de su rentabilidad.Esta correlación se ha roto desde mediados de abril, aunque la brecha se ha reducido algo últimamente. La sensación de incertidumbre, no obstante, domina en el mercado y sigue atrayendo compradores a la renta fija, lo que ha provocado que la rentabilidad acentúe su caída.El bono alemán tiene un rendimiento del 3,64%, el nivel más bajo desde enero de 1999. Estas bajas rentabilidades son otro claro síntoma de que el mercado espera una bajada de tipos de interés la semana próxima.'Si hay bajada de tipos no es descartable que los bonos corrigieran algo, pero lo lógico sería que las rentabilidades se mantuvieran bajas un tiempo. Ahora reflejan un escenario casi deflacionario', explica Pedro Mirete de Ahorro Corporación. La mayoría de los expertos coincide con esta valoración. La percepción en el mercado de que los tipos de interés seguirán bajos un tiempo implica que la renta fija continuará atrayendo dinero. Por tanto, muchos expertos no descartan que la deuda resulte ser la mayor beneficiada en caso de una rebaja de tipos sustanciosa.Otros señalan que las rentabilidades ofrecen escaso atractivo y por ello desaconsejarían este tipo de inversiones.Los indicios de recuperación económica serán la clave y EE UU, como siempre, marcará la pauta. Los síntomas de mejora ayudarán a frenar la subida del precio de la deuda. Otros expertos consideran que la renta variable marca la evolución de las acciones. 'Cuidado con la Bolsa', advierte un analista.