Las cajas responden al Banco de España que es 'difícil' frenar el tirón del crédito
El supervisor bancario ha hecho varios llamamientos en el último mes a la banca para que modere la concesión de créditos hipotecarios. El presidente de la CECA, Juan Ramón Quintás, respondió ayer al mensaje. Señaló que comprende 'la preocupación del supervisor', pero le parece 'difícil' frenar la concesión. Cuando un cliente 'solvente', 'sin deudas' y que 'cumple los criterios' del mercado -por lo que no entraña riesgo de insolvencia- pide un crédito, 'es casi imposible cerrar ese grifo', aseveró.
Quintás destacó que es complicado que las cajas apliquen medidas diferentes a las actuales, ya 'son más cuidadosas' al dar créditos y han aumentado los filtros de selección. Aun así, insistió en que él reclama recurrentemente a las cajas que extremen la prudencia.
El crédito hipotecario sigue creciendo en el sistema financiero a ritmos superiores al 20%. Según los datos de la Asociación Hipotecaria, el aumento fue del 21,5% en febrero. En las cajas, el aumento fue del 16,6% en abril. Mientras el último dato de los bancos refleja un incremento del 8,3% en febrero.
Asimismo, consideró 'inimaginable' una subida de tipos de interés en próximos meses dada la ralentización económica en la UE. En caso de subida, apuntó el 'peligro' para la banca porque subiría la morosidad pero también para el crecimiento de la economía española y la renta de las familias.
Quintás no se ahorró ayer una crítica al vicepresidente económico, Rodrigo Rato, que el martes, por segunda vez en algo más de una semana, volvió a exigir a las cajas mayor transparencia. Señaló que 'deben someterse' a un sistema de control similar al del resto de sociedades y deben adoptar 'en breve' también 'códigos de conducta'.
'No deja de sorprendernos' la afirmación, dijo Quintás, quien calificó de 'absurdo' este tipo de comentarios e insistió en que las cajas han sido siempre 'precursoras' y, pese a no estar obligadas a ello, 'se han adelantado' a la Ley Financiera que impone un comité de auditoría independiente para fiscalizar la actuación de los consejos, como recomendaba el Informe Aldama. Recordó, además, que 'ya pactamos con la CNMV para autoobligarnos a que se extendiera la norma a las cajas'. Añadió que éstas cuentan desde hace tiempo con un comité de control con funciones que van más allá de las estipuladas para sociedades cotizadas, ya que es un órgano independiente que 'puede suspender cualquier iniciativa del consejo', afirmó, tras la presentación del 20 Congreso Mundial de Cajas de Ahorros que se celebra en Madrid hoy y mañana.
La CNMV ya acordó con la CECA y con la Asociación Española de Banca que cada entidad decida si crea un comité de auditoría al margen del de control, aunque admite que no es necesario.
Quintás calificó de 'error' que no se tuviera en cuenta a las cajas para elaborar la normativa e hizo hincapié en que 'lo único que irrita a las cajas es que se las discrimine'.
Ya en el marco del congreso, el núcleo que centrará el cónclave será la defensa del pluralismo en el sistema financiero, como explicó ayer el presidente del Instituto Mundial de las Cajas de Ahorros, Holger Berndt. Criticó, además, que los reguladores quieran aplicar normas estándar porque ponen 'en peligro' la capacidad de entidades regionales 'para atender sus mercados'.
Pluralismo
El fondo de su discurso reflejó también un llamamiento a la no discriminación de las cajas en la elaboración de normas internacionales y pidió que éstas 'dejen lugar a un mayor pluralismo'. Explicó que en el nuevo acuerdo de capital, Basilea II, las cajas han tenido que presionar para que se tuviera en cuenta sus puntos de vista frente a los de los grandes bancos. Pronosticó que los debates entre la Comisión Europea y el Comité de Basilea terminarán en 2004. Y criticó la excesiva armonización de normas que a veces propugna la UE, como en casos de protección del consumidor.
El director general de la CECA y vicepresidente del Instituto Mundial de Cajas, Emilio Olavarrieta, recordó que las cajas ya han puesto en marcha un proyecto de control de riesgos para aplicar Basilea II. El congreso reúne a representantes de 380 cajas de más de 60 países.