El Bundesbank se revela pesimista en su informe frente al poco realismo de Berlín
Por primera vez, el Bundesbank se ha mostrado hoy inquieto por el impacto de la actual apreciación del euro sobre las exportaciones alemanas, lo que constituiría un "freno adicional" sobre la coyuntura de la locomotora de la zona euro. En su informe mensual, el banco central alemán reconoce que el actual tipo de cambio dificulta aún más la actividad de las empresas germanas a escala internacional.
La divisa europea se cambia estos días en torno a los 1,17 dólares, lo que materializa los factores que baraja el BCE para acometer un recorte de tipos en su reunión del próximo 5 de junio. A juzgar por las declaraciones del presidente del Bundesbank y miembro del Consejo de Gobierno del BCE, Ernst Welteke, es más que probable que se rebaje el precio del dinero.
"El tipo de cambio del euro respecto al dólar ha progresado un 1,6% respecto a su cotización media del cuarto trimestre de 2002", señaló. En estas condiciones, el Bundesbank vislumbra una poco alentadora evolución de la coyuntura alemana, ya que las exportaciones constituyen uno de los últimos motores del país, y juzgó de "irrealista" la previsión de crecimiento del Gobierno del canciller, Gerhard Schröder, situada en el 0,75% para 2003. "Conviene tener en cuenta el hecho de que el crecimiento de la economía alemana en 2003 será probablemente más débil, teniendo en cuenta los elementos disponibles actualmente", advierte la entidad alemana.