El CGPJ suspende siete meses a la juez Torrecilla por intentar beneficiar a Conde
El pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha acordado hoy suspender por siete meses en sus funciones a la juez de vigilancia penitenciaria María del Prado Torrecilla, por una falta muy grave, al presionar a sus compañeros para que concedieran beneficios penitenciarios a Mario Conde. Según ha explicado el portavoz del Consejo, Enrique López, todos los vocales estuvieron de acuerdo en sancionar a la juez como autora de una falta muy grave, aunque la suspensión de la juez de Madrid por siete meses se aprobó por diez votos a favor y nueve en contra.
Esto significa que la juez de la vigilancia penitenciaria número 2 de Madrid pierde su destino y deberá optar, una vez cumplida esta sanción, a una nueva vacante como excedente, es decir, que elegirá en último lugar respecto al resto de los aspirantes. Durante el debate, los vocales que votaron en contra apoyaron la propuesta remitida por la Comisión Disciplinaria de que se suspendiera a la juez por dos años, sin embargo, los consejeros de la mayoría estimaron que la sanción era excesiva y optaron por proponer siete meses, como finalmente se aprobó.
El instructor del expediente disciplinario planteaba la suspensión por tres años de la juez de vigilancia penitenciaria como autora de dos faltas muy graves (dos años por presiones a sus compañeros y un año abuso de la condición de juez respecto al director de la prisión donde se encuentra Conde), aunque la Comisión Disciplinaria no estimó probada esta segunda falta y hoy ya no se entró a analizarla. Por su parte, el fiscal planteó la expulsión de la carrera judicial de la juez "por la gravedad e intensidad" de la conducta de la juez, que "presionó de forma continuada en el tiempo" a sus compañeros, y destacó "el grave daño producido por Torrecilla en la imagen pública del juez, que ha de aparecer absolutamente imparcial a la vista de los ciudadanos".
El Consejo abrió el pasado 24 de diciembre expediente disciplinario a Torrecilla tras la denuncia presentada contra ella por la juez de vigilancia penitenciaria número 1 de Madrid, Reyes Gimeno (encargada de resolver los beneficios penitenciarios solicitados por Mario Conde), en la que afirmaba que su compañera le había presionado para intentar favorecer al ex banquero, aunque ella rechazó la petición de libertad condicional formulada por el ex banquero. La denuncia fue apoyada por el otro juez de vigilancia penitenciaria de Madrid, quien ratificó que también había sido objeto de presiones cuando tuvo que resolver sobre Conde.