El brent cae a 25 dólares mientras se esclarece el estado de los pozos iraquíes
Jornada de volatilidad, con precios que han oscilado en una horquilla superior a dos dólares. Esta mañana, el precio del crudo acusó el inicio del conflicto bélico en Irak de las 3.30, hora española, y cayó un 6,3%. El barril se desinflaba por la idea de una guerra que analistas e inversores presuponían breve nada más comenzar, más aún que la de 1991 que duró 43 días con un ejército iraquí mayor y mejor preparado. En paralelo al primer ataque "de tanteo", George Bush se apresuró a declarar que la guerra en sí puede alargarse más de lo previsto. "Lo que va a seguir no será una repetición de cualquier otro conflicto. Será de una fuerza y una escala y un alcance más allá de cualquier cosa que se haya visto hasta ahora", resumió el secretario de Defensa de EEUU, Donald Rumsfeld.
El anuncio de que unidades militares estadounidenses abrieron fuego de artillería contra posiciones iraquíes, en lo que parece ser el comienzo de la ofensiva por tierra contra Irak desde Kuwait, vino acompañado de otro. Puede pasar ahora como sucedió en el 91: la cadena Fox daba la alarma de que ardían pozos en el sur del país, que diariamente extraen casi la mitad de los 2.500 millones que refina el séptimo exportador mundial de crudo. Los precios del petróleo, hasta entonces moderados en torno a los 26,5 dólares el del Mar del Norte para entrega en mayo en Londres y alrededor de 28,9, el light sweet crude en Nueva York (después de cinco sesiones consecutivas a la baja), se dispararon hasta los 27 y 30 dólares, respectivamente.
No obstante, ni la Casa Blanca ni el ministro de Petróleo iraquí, a diferencia de Rumsfeld, dijeron tener indicio alguno de que hubiera pozos en llamas. Y el petróleo, por consiguiente, volvió a la "calma" matutina, mientras las sirenas de ataque aéreo sonaban en Bagdad. Se esperan días cruentos.
Al traste con la unión y con la ONU
"Han ignorado la oposición de la mayoría de países y ciudadanía del mundo, han hecho caso omiso al Consejo de Seguridad de la ONU para iniciar el ataque", resumió Kong Quan, portavoz del ministerio de Exteriores chino. Legal o ilegal, la guerra ha empezado y en su estallido subyacen cuestiones como la cohesión de la UE, el futuro de las relaciones de ésta con EEUU, el papel de las Naciones Unidos, el respeto del derecho internacional y las iniciativas económicas que tendrán que tomar los países implicados. "Tristeza" y "crisis profunda" son los términos que ha empleado el ministro griego de Asuntos Exteriores y presidente en ejercicio del Consejo de Ministros de la Unión, Yorgos Papandreu.
'La última oportunidad perdida'
El presidente del Gobierno, José María Aznar, ha comparecido ante los medios de comunicación, asegurando que el apoyo humanitario de España en Irak es "honroso", que las acciones militares en ese país serán "congruentes" para lograr el desarme y que "se reducirán al máximo" para limitar las pérdidas humanas. "La última oportunidad perdida lo es sólo para Sadam", ha exclamado. Después, se trasladará a Bruselas, donde se reunirán los Quince y, entre otros, con el mayor aliado de Washington en la contienda, el primer ministro británico Tony Blair. Deberán enfrentarse a los dos homólogos que mayor oposición les han mostrado: el presidente francés Jacques Chirac, que juzga que el conflicto tendrá "graves consecuencias para el futuro", y el canciller alemán, Gerhard Schröder. El primer ministro francés, Jean Pierre Raffarin, mantiene la premisa de que una guerra es un fracaso. "Francia quiere repetir su convicción de que una guerra no es la solución. Empeorará la situación en una región [por Oriente Próximo] que ya está débil", confesó.
La OPEP anuncia la suspensión de sus cuotas de extracción
La OPEP ha anunciado la suspensión de sus cuotas de extracción de crudo tras el comienzo de los ataques. Según un comunicado hecho público por la organización en Viena, ha hecho un llamamiento a sus miembros para que aprovechen todas sus capacidades de extracción, más allá de las cuotas establecidas para cada uno de sus miembros. Para el secretario de Energía estadounidense, Spencer Abraham, la provisión en los mercados mundiales es "más que adecuada" para compensar cualquier escasez provocada por la guerra". "Mantenemos una estrecha comunicación con los estados miembros, con los principales productores y con la OPEP", añadió Claude Mandil. "Apreciamos las medidas tomadas por los países productores para prevenir cualquier falta en el mercado mundial de petróleo, tanto en lo que va de año como en este momento concreto", precisó la Agencia Internacional de la Energía.