Nokia revisa a la baja sus previsiones
'Es la peor información en el peor momento'. Así definía ayer un gestor de fondos las noticias procedentes del líder mundial de teléfonos móviles, Nokia, que ha recortado sus previsiones de ingresos y beneficios para el primer trimestre del año. Las razones del cambio de opinión pasan por el estancamiento en la venta de terminales y la caída de la demanda de componentes de red.
Las ganancias, excluyendo ciertas partidas, oscilarán entre los 0,15 y 0,17 euros por acción, muy lejos de los 0,19 euros previstos inicialmente. Los ingresos de la filial dedicada a redes se desplomarán entre un 15% y un 20%, lo que llevará a la participada a registrar pérdidas 'sustanciales', según la empresa.
Nokia ha eliminado 9.000 puestos de trabajo, el 15% del total, en los últimos dos años y ha forzado a los suministradores a recortar los precios de los productos que le venden. Pero el ajuste no ha sido suficiente, sobre todo, a la luz de la caída de la demanda. Las ventas llevan paralizadas desde el año 2000, cuando la telefonía móvil alcanzó niveles cercanos a la saturación en Europa y Estados Unidos, y el endeudamiento de las operadoras provocó un drástico recorte de la inversión.
Las ventas en la división de teléfonos de Nokia, que acapara tres cuartas partes de los ingresos, estarán cerca de la parte baja de las previsiones anunciadas anteriormente. Es decir, se acercarán más al nulo crecimiento, que al alza del 9% que constituía el rango más alto de la estimación. Las ventas totales caerán 'ligeramente'.