El BBVA destinó 57 millones de euros a la prejubilación de Ybarra y Uriarte
Según la información registrada por el banco en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la jubilación del copresidente del BBVA Emilio Ybarra y del consejero delegado Pedro Luis Uriarte le costó a la entidad 57 millones de euros. Dicha cuantía se cargó básicamente contra reservas, con lo que no figuró en la cuenta de resultados.
En el documento enviado a la CNMV, al explicar las obligaciones contraídas por el banco en materia de pensiones y seguros de vida, se señala lo siguiente: 'Los derechos consolidados correspondientes a antiguos y actuales miembros del consejo de administración del banco que lo eran a 31 de diciembre de 2000 y a 31 de diciembre de 2001 ascienden a 27.894.069 y 84.939.548 euros, respectivamente. El incremento de la cifra a 31 de diciembre de 2001 es consecuencia de la jubilación y prejubilación de consejeros ejecutivos durante el año, que pasan a formar parte del colectivo de antiguos miembros del consejo de administración'.
La diferencia entre 27,89 y 84,94 millones es de 57,05 millones de euros y el banco lo atribuye a la jubilación y prejubilación de consejeros ejecutivos durante el ejercicio 2001. En ese año, los únicos consejeros ejecutivos que causaron baja fueron Ybarra y Uriarte.
Fuentes del BBVA justifican que esa cantidad es resultado de 'la aplicación automática de los antiguos contratos de consejeros ejecutivos del BBV, que no fueron modificados tras la fusión'.
Derecho consolidado
Las mismas fuentes explican que esos 57 millones suponen un derecho consolidado, pero no una cantidad efectivamente cobrada, y que esa cifra resulta de la suma de diferentes conceptos. En primer lugar, los importes que se habían venido dotando cada ejercicio para compromisos por pensiones. En segundo lugar, los sueldos que corresponderían tanto a Ybarra como a Uriarte hasta cumplir los 65 años si hubiesen seguido en sus cargos. Y en tercer lugar, las dotaciones que les hubieran correspondido en esos años de trabajo adicionales.
Aunque el reconocimiento está hecho en las cuentas de 2001, el cobro no es inmediato. Como prejubilados, Ybarra (durante tres años) y Uriarte (durante siete) siguen cobrando su nómina de copresidente y de consejero delegado. Fuentes del BBVA explican que en este punto es un esquema similar al de miles de prejubilados, a los que se le res reconoce entre el 80% y el 100% de su sueldo.
Al cumplir los 65, Ybarra y Uriarte pasarán a percibir la pensión, que está calculada para 15 años.
Fuentes del BBVA explican que no fue necesario ningún acuerdo del consejo de administración de la entidad fusionada para la aplicación de estas cláusulas contractuales y que la cantidad destinada a la jubilación de ambos no requirió pacto adicional alguno. En ese sentido, recalcan que de ningún modo se trata de indemnizaciones. El presidente del banco, Francisco González, señaló el pasado viernes, en rueda de prensa, que la entidad 'no ha pagado indemnizaciones a ningún consejero', y que esa es la razón por la que tal información no aparecía en la memoria.
La información sobre los 57,05 millones destinados a 'la jubilación y prejubilación de consejeros ejecutivos durante el año' no iba tampoco incluida en la memoria de 2001, sino que el banco la comunicó a la CNMV en el folleto continuado de emisión. Eso sí, sin nombrar a los dos beneficiarios y sin desglosar la parte del importe total que le corresponde a cada uno.
La salida de Ybarra y Uriarte, el 17 de diciembre de 2001, puso fin adelantado al periodo transitorio previsto en los acuerdos de fusión de BBV y Argentaria. Los pactos establecían un periodo con doble presidencia que acabaría en la junta de accionistas de 2002, que se celebró el 9 de marzo.
Más que el adelanto en tres meses del fin del periodo transitorio, sorprendió la salida de Uriarte, cuya jubilación no estaba prevista hasta cinco años después. El adelanto se producía 'para facilitar la puesta en marcha de una nueva etapa en BBVA, una vez consolidada la fusión', según la explicación oficial. La razón que se adujo para la salida adelantada de Ybarra es que la copresidencia era para gestionar la integración y ésta había concluido con éxito antes de los plazos fijados. Tres meses después estalló públicamente el escándalo de las cuentas secretas, que obligaba a ver los acontecimientos con otro prisma.
Ex consejeros declaran hoy por el pago a Amusátegui
Siete ex consejeros del SCH están citados para declarar hoy como testigos ante la juez de la Audiencia Nacional Teresa Palacios, que les interrogará sobre su conocimiento del pago de 43,75 millones de euros que recibió el ex presidente del banco José María Amusátegui al jubilarse. Estos siete ex consejeros pertenecían al consejo de administración del SCH el 17 de abril de 1999, cuando este órgano dio, según declaraciones anteriores, el visto bueno a la cláusula que permitía este pago. El primero en declarar será el ex vicepresidente segundo del banco Santiago Foncillas, a quien seguirán el presidente de Cortefiel, Gonzalo Hinojosa; José Manuel Arburúa, y el presidente de Campofrío, Pedro Ballvé.