El Banco Mundial teme los efectos del conflicto
El presidente del Banco Mundial, James Wolfensohn, afirmó ayer en Roma que una eventual guerra contra Irak tendría efecto en la actitud de los inversores a la hora de asumir riesgos y 'probablemente detendría el crecimiento de la economía' internacional, informa Efe.
Wolfensohn reconoció estar 'verdaderamente preocupado' por la perspectiva de un conflicto bélico contra Irak, ya que 'es imposible prever qué sucederá', señaló el alto cargo del Banco Mundial.
Las 'crecientes tensiones geopolíticas' han llevado a Morgan Stanley a rebajar el crecimiento para 2003 y 2004, informa Ana B. Nieto desde Nueva York. El informe del que se hace portavoz Stephen Roach, quien en repetidas ocasiones ha hablado de la segunda recesión y el riesgo de deflación en EE UU, asegura que el crecimiento del PIB mundial en 2003 será del 2,5% y no del 2,9% previsto a finales de diciembre. Para 2004, la caída sería menor, pero aún no se registraría el 4% de crecimiento estimado, sino el 3,8%.
Cuando se hicieron las primeras previsiones, la amenaza de una guerra en Irak ya existían. Sin embargo, la situación se ha deteriorado en los primeros meses del año y la revisión a la baja va a tener el efecto de 'transformar una recuperación anémica de la economía global en un mundo que vuelve a estar al borde de una nueva recesión', según los economistas de Morgan Stanley.
En concreto, este equipo de análisis considera que el crecimiento de EE UU será del 2,1% este año, por debajo de las previsiones de la Reserva Federal y el Gobierno, y del 4,1% el año que viene. En la zona euro, el PIB crecerá apenas un 0,6% en 2003, para subir hasta el 2,3% en 2004. En España se estará por encima de esta media, al registrarse crecimientos del 2,1% y el 3%. Incluso la economía más dinámica del mundo, la china, que ha crecido en tasas del 8%, verá reducido al 7% y al 7,8% su crecimiento en 2003 y 2004, respectivamente.
El equipo dirigido por Roach asegura que por Irak y Venezuela el barril de crudo brent llegará a cotizarse a 40 dólares en marzo para rebajarse algo en abril y, en el mejor de los escenarios, acabar el año a 23 dólares. Las incertidumbres pueden subir si Sadam Husein usa las armas que presuntamente tiene, si el conflicto palestino-israelí se va de las manos o si crece la alarma terrorista. 'La división entre EE UU y sus aliados sólo aumenta el factor de inestabilidad geopolítica y no hay certeza sobre la estabilidad de Irak en la época pos-Sadam', dice el informe.
A todo ello hay que añadir que el mundo está en una situación más frágil en términos económicos que en 1991, fecha de la primera campaña militar en el Golfo.
Entonces, 'el mundo industrializado tenía el apoyo de tres motores, EE UU, Japón y Europa', y se beneficiaba del 'milagro asiático', que sufrió un colapso en la segunda mitad de los noventa. 'Por el contrario, el mundo sólo tiene ahora un motor', dice Roach en alusión a EE UU.