El Ibex rebota y recupera los 6.000 puntos de la mano de los bancos
Ayer subió la Bolsa un 1,17%. Como en los peores partidos de fútbol, lo único positivo de la jornada de ayer fue el resultados. El volumen, poco, y la convicción, aún menos, denotan la falta de recorrido del mercado en la situación actual, atrapado entre varios fuegos: la guerra, la incertidumbre económica y la flojera de resultados empresariales.
El volumen de negociación aún sufre de raquitismo, 1.426 millones de euros en la sesión de ayer, que se quedan en poco más de 1.000 millones de euros sin tener en cuenta las operaciones especiales y las compraventas en bloques. Desde las 11.30 horas de la mañana y hasta que se publicó, poco después de las 14.30, el dato ISM de gestores de compras en Estados Unidos, el Ibex no se salió del rango que va de los 5.990 puntos a los 6.010. Desde que se abrió la sesión hasta que se publicó dicho dato el volumen de negocio en el Ibex 35 no llegó a los 50 millones de títulos. Dos terceras partes del total se negociaron después, en las últimas dos horas y media. Los pocos inversores que operan lo hacen pendientes exclusivamente de Estados Unidos. No hay otro factor.
El dato ISM de gestores de compras estuvo en línea con lo que el mercado esperaba. La lectura de 53,9 puntos, aunque supone una caída sobre los 55,2 de diciembre, implica una tímida expansión del sector industrial. Así, Wall Street abrió con alzas inferiores al 1%, tal y como pronosticaban los mercados de futuros.
La banca recupera
En España la única actividad destacable vino del lado del sector bancario. BBVA y Santander habían perdido alrededor del 20% en la segunda mitad de enero. Ayer rebotaron. Ambos rondaron ganancias del 3%, pero al cierre éstas se quedaron en el 2,11% para Santander y del 1,39% para BBVA.
Los resultados presentados la semana pasada no han gustado a los analistas, sobre todo porque el panorama para este año no pinta bien. Aun así, ayer hubo hueco para las ganancias, vinculadas a la mejora del sector financiero en el resto de Europa. Las aseguradoras remontaron posiciones gracias a que el regulador británico ha relajado los criterios de solvencia.
Entre las dos grandes entidades financieras del Ibex aportaron 25 de los 40 puntos que subió el Ibex 35. Telefónica, que aportó al Ibex otros 15 puntos, fue de menos a más y terminó ganando el 1,22%.
En los mercados europeos la sesión fue menos alcista que en España, con la excepción de Londres, donde la reforma de la normativa sobre seguros impulsó un 3,42% el índice Footsie. El índice Euro Stoxx 50 subió un 1%, un alza superior a la de París y Milán. Alemania fue la cenicienta de las plazas europeas, con una subida del 0,15%.
La mayor parte de los expertos mantiene el perfil negativo con el que terminó enero. La amenaza de guerra es cualquier cosa menos nueva, pero ha borrado del mapa a los ahorradores y no permite que nadie regrese. 'Intentar afinar la estrategia de inversión es como dedicarse a recoger monedas delante de un bulldozer', señalan los expertos de Credit Suisse.
En la Bolsa de los días previos a la guerra sólo hay especulación. Comprar una acción a una semana vista se puede considerar invertir a muy largo plazo. Por eso el mercado es un día plano y al otro extremadamente volátil, y por eso el volumen de negocio está limitado a lo que muevan los gestores de hedge funds.
Por si fuera poco, el Gobierno de Estados Unidos presentó un presupuesto con un déficit récord. No es ninguna novedad, ni las cuentas en sí ni las asunciones de crecimiento (2,9%) o inflación (2,2%). El mercado ya lo sabe. También sabe que la guerra va a costar varias decenas de miles de millones, y que el crudo puede dispararse.
Credit Suisse rebaja las previsiones sobre BBVA y Santander
Los resultados de los dos grandes bancos acaparan desde hace casi una semana la atención de los inversores. La presentación de las cuentas ha dado lugar a una oleada de recomendaciones negativas sobre Santander y BBVA.Ayer fueron los analistas de Credit Suisse quienes redujeron drásticamente las previsiones de beneficio de los dos grandes del sector financiero. Un 17% para BBVA y otro 7% para Santander. Los expertos no se muerden la lengua ni al calificar de 'pobres' los resultados del cuarto trimestre ni al afirmar que las acciones de ambas entidades están caras. Así, la recomendación sobre BBVA es de infraponderar, mientras la de Santander es neutra. Goldman Sachs no es tan pesimista. Considera que, pasada la sorpresa provocada por el alto nivel de provisiones extraordinarias, las cuentas han sido algo mejor de lo esperado. Aun así, la recomendación sigue siendo de infraponderar. Los analistas de Fortis y de ING han rebajado por su parte, la calificación de BBVA, y Merrill Lynch recortó, paralelamente, las previsiones de beneficio del Santander. Más que el riesgo asociado a América Latina, que no es ni mucho menos una cuestión baladí, los expertos citan las dificultades que tendrán las entidades para mantener las altas tasas de crecimiento en el negocio doméstico. 'El retraso que se produce entre las rebajas de los tipos de interés y su traslado a los créditos provocará dos trimestres de reducción del margen', afirma Rafael Alonso, de Espírito Santo. 'Compensar estos recortes con aumento de volumen es complicado, dada la alta cuota de mercado que ya tienen las entidades. Aunque no crezca la mora, 2003 será un año complicado'. Las agencias de calificación financiera, al menos, no han modificado su visión, ni para bien ni para mal, sobre las dos grandes entidades financieras del mercado español.