La industria del automóvil de EE UU se vuelca en los coches híbridos
El plan de General Motors es llegar a producir turismos y todoterrenos ligeros con la introducción gradual de estos motores, que combinan la combustión tradicional (gasolina y diésel) y la eléctrica, en 12 modelos. Ya en otoño de este año las empresas de alquiler podrán adquirir los Chevrolet Silverado y los GMC Yukons con este tipo de motor que reduce las emisiones contaminantes un 25% como mínimo.
La entrada de GM y la previamente anunciada de Ford en un terreno en el que los japoneses Toyota, con el Prius, y Honda, con el Insight y el Civic Hybrid, tenían la exclusividad en EE UU no les ha pillado a estos fabricantes con la guardia baja. Toyota lanzará un nuevo motor de este tipo con más autonomía en un todoterreno ligero de la marca Lexus. El objetivo de la empresa es que se vendan en todo el mundo 300.000 unidades de coches híbridos en 2005. Estrellas del cine como Cameron Díaz y asociaciones ecologistas y religiosas están patrocinando estos coches.
Y mientras el debate sobre el diésel languidece en un continente en el que nunca se ha apostado por él, GM da un paso más allá. En la actual edición del Salón de Detroit, la compañía presentó su prototipo Hy Wire, que, valorado en 10 millones de dólares, es el más caro de los nunca presentados. En él se combina la pila de hidrógeno y la conducción eléctrica. 'Es un coche radical que muestra la evolución de la tecnología y el diseño', explican en GM.
La empresa estudia el desarrollo de pila combustible en colaboración con Toyota y tiene cuatro centros de desarrollo en EE UU y Alemania en los que invierte entre 300 y 400 millones de dólares al año. Para su presidente, Rick Wagoner, es una obligación estudiar la alternativa al combustible tradicional. De momento, el desarrollo es lento y los coches son muy caros, admiten en el laboratorio-fábrica que la empresa tiene en Rochester, pero en GM se espera que los primeros coches estén en el mercado en 2010.