Telefónica vuelve a la política de dividendos y ampliará capital para retribuir al accionista
El consejo de administración de Telefónica propondrá a la junta de accionistas el reparto de un dividendo de 0,25 euros por acción en 2003 y dos ampliaciones de capital gratuitas durante el primer trimestre del año que viene. Telefónica cumple así su compromiso de repartir dividendo después de que en 1998 dejara de hacerlo.
Esta decisión provocó que la CNMV suspendiera durante varios minutos la cotización de la operadora. Es la primera vez que el organismo suspende una cotización ante el anuncio de un reparto de dividendos.
Además, el Consejo de Administración ha adoptado los "acuerdos pertinentes" para dos ampliaciones de capital gratuitas para sus accionistas, que ya fueron aprobadas el pasado 12 de abril en la última Junta General. La operadora explica que estas iniciativas suponen un "amplio paquete de medidas de retribución al accionista, con el objetivo de hacerle partícipe de las mejoras de eficiencia y aumento de flujos de caja generados en los últimos años".
Las nuevas ampliaciones de capital se realizarán con cargo a reservas de libre disposición, en una cuantía equivalente, cada una de ellas, al 2% del capital social.
La primera se llevará a cabo durante el próximo mes de enero, mediante la emisión de 97,2 millones de nuevas acciones ordinarias, que se distribuirán gratuitamente a los accionistas por cada cincuenta que posean en ese momento. Está previsto que la segunda ampliación, que supondrá la emisión de 99,12 millones de nuevas acciones, se lleve a cabo entre los meses de febrero y marzo del 2003 y, en todo caso, con anterioridad a la próxima Junta General Ordinaria de Accionistas.
Cambios en el consejo
Por otra parte, el consejo de administración felicitó a Luiz Fernando Furlán -que ha solicitado su baja como consejero de la operadora- por su designación para el cargo de ministro de Desarrollo, Industria y Comercio de Brasil.
Furlán fue nombrado consejero de Telefónica el 20 de diciembre de 2000 y su designación como consejero independiente fue uno de los primeros cambios realizados en el consejo de administración a propuesta del Presidente, César Alierta.