Las exportaciones de Asia se resentirán en 2003 por la caída de los pedidos de EE UU
Los primeros meses del próximo año vendrán acompañados de una fuerte desaceleración en las exportaciones de Asia. La menor demanda de productos desde Estados Unidos, sobre todo tecnológicos, será responsable en gran parte de la contracción.
Así lo augura el Credit Suisse First Boston (CSFB) en un informe en el que prevé que las exportaciones asiáticas crecerán en los seis primeros meses del año a un ritmo de entre el 5% y el 6% frente al año anterior 'más débil que el 15%-18% registrado en la segunda mitad de este año, pero no es una catástrofe', afirma el CSFB.
Frente a la desaceleración de las ventas a EE UU, que crecerán sólo entre el 0%y el 3% durante los tres primeros meses, el comercio dentro del propio continente continuará a buen ritmo, con una subida del 6% al 10% con respecto a un año antes.
EE UU absorbió en 2001 el 21,3% de las exportaciones de Asia, mientras que el comercio intrarregional alcanzó el 53% del total.
En lo que queda del año, sin embargo, las exportaciones mantendrán el tipo, gracias, sobre todo, a los pedidos de productos electrónicos. 'Los nuevos pedidos de EE UU de productos electrónicos y ordenadores crecieron en septiembre un 4,9% anual, reafirmando que las exportaciones de tecnologías de la información de Asia se mantendrán fuertes hasta el final de 2002', dice el banco.
Pero 'el momento cíclico de la demanda de EE UU para productos asiáticos de tecnologías de la información se está desacelerando. Esto apunta a una fuerte desaceleración del crecimiento de las exportaciones asiáticas en la primera mitad de 2003'.
El indicador adelantado a tres meses de la OCDE es otra de las claves de cómo funcionarán las exportaciones asiáticas. En septiembre creció un 3,8% frente al año anterior, lo que pronostica que en el final del año las ventas serán mejores que las de los meses anteriores. Sin embargo, el indicador a seis meses apunta a una desaceleración en la OCDE, es decir, corrobora un menor ritmo en el crecimiento de las exportaciones asiática, aunque no un 'colapso'.