El reto de los nuevos dirigentes chinos es extender el bienestar a toda la población
Con Hu Jintao como nuevo secretario general del Partido Comunista y Jiang Zemin conservando la presidencia de la comisión militar, China cerró la semana pasada uno de los congresos del partido más importantes desde que nació la República Popular el 1 de octubre de 1949. Crucial porque ha supuesto la llegada de una nueva generación de dirigentes y ha bendecido la entrada de los empresarios en el partido.
El país prosigue así el proceso de reforma económica que lanzara Deng Xiaoping en 1978, y que se vio recompensado a finales de 2001 con la entrada en la Organización Mundial de Comercio (OMC).
La acogida de los empresarios en la Constitución ha llegado de la mano de la teoría de las Tres Representaciones, formulada por el todavía presidente del país, hasta marzo, Jiang Zemin. Su ideario ha sido registrado en la Carta Magna, junto al marxismo-leninismo, el Pensamiento de Mao Zedong y la Teoría de Deng Xiaoping.
El congreso, en el que de puertas afuera se ha hablado más de economía que de política, se ha fijado como objetivo para las próximas dos décadas construir 'una sociedad acomodada' y extender el bienestar a toda la población. Para ello, los nuevos líderes comunistas tendrán que hacer frente a la disparidad de ingresos entre ricos y pobres, la reforma de las empresas estatales, el paro rampante y la corrupción.
Hu Jintao y los otros ocho miembros del Comité Permanente del Buró Político, cuya composición se hizo pública el pasado viernes, pretenden servirse de la iniciativa privada para lograr sus objetivos. China prevé cuadruplicar el PIB en 2020 y situarlo en 4,32 billones de dólares.
Los desafíos no serán sólo económicos. Un grupo de 192 disidentes hizo llegar una carta a los más de 2.000 delegados que acudieron al congreso en la que pedían la revisión de las manifestaciones de Tiananmen, que acabaron en una masacre en 1989, y una transición hacia la democracia. 'A medio plazo, China tendrá que hacer reformas políticas', dice un investigador de la Universidad que pide el anonimato.