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Laboral

Trabajadores de Sintel exigen al Gobierno carga de trabajo

Los trabajadores de Sintel aprobaron ayer en asamblea la creación de una sociedad anónima laboral que contará con recursos económicos aportados por los propios empleados, valorados en cerca de 24 millones de euros. Las cantidades procederán de las indemnizaciones y la liquidación de la desaparecida compañía que corresponde a cada trabajador, según el presidente de la Asociación de Trabajadores de Sintel, Adolfo Jiménez. Además, la nueva sociedad contará con un equipo gestor independiente, al frente del cual estará José Adel, quien trabajó para Renfe hace algunos años y fue directivo de Sintel, despedido en la etapa que la compañía perteneció a la familia Mas Canosa.

Si se produce un acuerdo con el Gobierno, la sociedad estaría operativa en el plazo de tres meses. Jiménez señala que la compañía contará con todos los ingredientes de una sociedad: 'Trabajadores profesionales y preparados con una media de edad de 45 años y distribuidos por todas las zonas geográficas de España, y una financiación propia de al menos el 51%, como en las sociedades anónimas laborales'.

La nueva compañía estaría abierta a la entrada de capital de otros grupos empresariales que pudieran estar interesados. El lugar de trabajo se ubicaría en las diferentes comunidades y en almacenes de alquiler.

'Sólo faltaría la carga de trabajo de Telefónica comprometida en los acuerdos alcanzados en agosto de 2001, que supusieron el levantamiento del conocido campamento de la esperanza, añade Jiménez. 'Exigimos al Gobierno y a Telefónica que cumplan lo que acordaron en agosto de 2001 y nos dejen trabajar'.

En caso de no lograr este apoyo, los trabajadores aprobaron un nuevo calendario de movilizaciones con el fin de presionar al Gobierno y 'concienciar a la sociedad española de que el problema no se ha resuelto después de 15 meses de intentos'.

El plan de movilizaciones, que comenzaría el 5 de noviembre y se alargaría hasta el 25 de mayo, no incluye ningún otro campamento pero sí una concentración multitudinaria de los trabajadores el 28 de noviembre en Madrid.

La sociedad surge como intento de solución a una situación en la que 1.100 trabajadores siguen en el paro y parte con el objetivo de organizarse 'como empresa y gestionar el trabajo que han realizado hasta ahora ante la ausencia de ofertas de recolocación pactadas con el Gobierno' explica Jiménez. Los trabajadores también acusan al Gobierno de bloquear la compra de Sintel por parte de la empresa rusa Televik que planeaba reflotar la compañía.

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