Wall Street ayuda al Ibex a recuperar los 6.200 puntos
Ayer, la Bolsa salvó por los pelos la cota de los 6.000 puntos, y hoy, se ha librado de cerrar la tercera peor semana del año. Sin embargo, ésta ha sido de las más nocivas en los últimos meses, en la que ha acumulado pérdidas del 2,75%.
El Ibex 35 ha recibido, como sus homólogos europeos, el impulso de Wall Street hoy, motivado por un buen dato de paro en EEUU, donde el desempleo bajó en agosto al 5,7%, el nivel más bajo del año desde marzo y por las ganancias de Intel. El selectivo español se ha revalorizado un 2,98%, hasta los 6.261,60 puntos, y el Nuevo Mercado se ha anotado un 2,8%, hasta los 1.715,70. Avances que ha compartido el resto de Europa: En París, el CAC avanzó un 3,4%; el Footsie londinense subió un 2,4%, y el Dax de Francfort a dos horas del cierre- ganaba un 3,1%.
Terra encabezó las ganancias del Ibex con un alza del 5,4%. El resto del grupo Telefónica hizo lo propio: la matriz ganó un 4%, TPI se anotó un 4,4%, y Móviles, un leve 0,2%. SCH y BBVA se anotaron un 3,2 y un 4,4%, respectivamente.
En cuanto a Repsol, ha celebrado hoy con una subida del 5,7% la firma, junto con Cepsa y BP, de un preacuerdo de compraventa del 5% de la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH) con la empresa portuguesa Galp Energía.
Los analistas atribuyen el avance al inminente ataque contra Iraq, uno de los mayores productores de crudo del mundo, en la región que concentra más de la mitad de las reservas de petróleo del planeta, que dispararía el precio del barril por encima de la barrera de los 30 dólares, ya que hoy se ha colocado en los 29 dólares por barril en EEUU.
A la vista está que las dudas sobre la recuperación económica no han apagado hoy el ánimo comprador de los inversores, que recibieron esta mañana el anuncio de la Comisión Europea de revisar a la baja las previsiones de crecimiento para este año, con un crecimiento del PIB de la eurozona de entre el 0,3% y el 0,6%.
Más optimista se mostró Jürgen Stark, vicepresidente del Bundesbank, respecto de la recuperación de la economía mundial, que vaticinó "cercana", al tiempo que calificó de "positivo" el crecimiento en EEUU, la eurozona, los países candidatos a la Unión Europea y los emergentes de Asia.