Expertos descartan que la desaceleración haya concluido y que el PIB supere el 2%
La recuperación económica no llega. Si en el segundo trimestre del año la Contabilidad Nacional revelaba la existencia de dudas razonables sobre el fin de la desaceleración económica iniciada hace varios trimestres, los datos de demanda conocidos hasta ahora referidos al tercer trimestre convierten las dudas en evidencias. La demanda energética, las ventas de automóviles o los gastos en turismo han tenido un comportamiento negativo en julio y agosto, lo que puede interpretarse como una señal de debilidad añadida en la economía española.
Pese a que las autoridades económicas han hecho hincapié en que el suelo de la curva de crecimiento se produjo supuestamente en el segundo trimestre, los expertos en contabilidad no lo ven con tanta seguridad. Los indicadores manejados por el Instituto Nacional de Estadística para analizar cómo puede comportarse la economía en los trimestres siguientes básicamente los índices de producción de la industria transformadora y producción de bienes intermedios siguen manteniendo comportamientos contractivos y ¢no permiten garantizar que se haya tocado suelo¢, según buena parte de los expertos en contabilidad consultados por este diario.
Incluso, admiten que tras el primer trimestre, ¢en el que se tenía una sensación más diáfana sobre el fin de la desaceleración¢, han surgido ¢detalles contradictorios que no permiten aclarar el diagnóstico¢.
Ángel Laborda, director de coyuntura de la Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas), es de esta opinión. No hay síntomas claros de recuperación. Desde los servicios de estudios de entidades financieras como BBVA y Santander Central Hispano abundan en esta idea.
La impresión es que es muy difícil que se produzca la recuperación a finales de este año, con el consumo de los hogares en clara desaceleración y un sector exterior que se ha recuperado, no por la fortaleza de las exportaciones a los principales socios comunitarios sino por la debilidad de las importaciones. Incluso, se baraja la posibilidad de que en el tercer trimestre continúe la desaceleración económica, con un crecimiento del PIB en torno al 1,8%, frente al 2% registrado en el primer y segundo trimestre del año. El cuarto trimestre será clave para ver la evolución en 2003. ¢Si se produce una recuperación en la inversión en bienes de equipo tendremos un año el 2003 al alza, pero si no ocurre esto, se iniciará otro ejercicio con un tono débil¢, comentan.
La atonía de la demanda interna llevó en agosto al Gobierno a reducir, por segunda vez, la previsión oficial de crecimiento económico para este año, del 2,4% al 2,2%. Desde el Instituto de Estudios Económicos (IEE), su director general, Juan Iranzo, estima que la economía española no crecerá más allá del 2% o 2,1% este año. Como principales incertidumbres, destaca la evolución de la actividad industrial y de los precios del petróleo.
Con todo, los analistas coinciden en que la coyuntura, aunque preocupante, no es alarmante. La economía española sigue creciendo por encima de la media comunitaria y creando empleo, aunque cada vez menos.
Los ingresos turísticos cayeron un 10% en agosto
El turismo es uno de los sectores que está siendo más afectados por la debilidad económica. Los ingresos por esta actividad cayeron en agosto entre un 8% y un 10% respecto al mismo mes del año anterior pese al ligero crecimiento del número de visitantes, según explicó ayer a Efe el presidente de la Agrupación Hotelera de las Zonas Turísticas (Zontur), José Guillermo Díaz. Para el presidente de la patronal hotelera, este descenso en la facturación se ha debido a la escasez de reservas previas, que tuvieron que ser compensadas por ofertas de última hora, lo que conlleva una notable reducción de los precios. En cuanto a las perspectivas para septiembre, aseguró que no son muy optimistas, porque el mercado de última hora, que dio buenos resultados en agosto, ahora ya no funciona debido a que menos gente puede disfrutar de sus vacaciones en esta época del año.
Díaz realizó una previsión bastante pesimista del verano en su conjunto, ya que espera un descenso hasta del 10%, tanto en el número de pernoctaciones como en los ingresos, aunque todavía no se disponen de datos definitivos.
En este sentido, el presidente de Sol Meliá, Gabriel Escarrer, advirtió en Palma de Mallorca que la recesión turística mundial, iniciada tras los atentados del 11 de septiembre, tendrá como consecuencia la disminución de beneficios en las cuentas de este grupo turístico a final de año. La actual temporada 'no ha sido buena, hay que decir la verdad', declaró Escarrer, reconociendo que la cuenta de resultados no cumplirá con las expectativas. Con ocasión de la firma de un convenio de Sol Meliá con la Universidad de las Islas Baleares (UIB), el empresario mallorquín se refirió a la situación turística internacional y manifestó que los ataques terroristas sobre Estados Unidos de septiembre de 2001 supusieron un 'hito y un trastorno' para el desarrollo del negocio turístico mundial, de manera especial del turismo norteamericano.
Por su parte, la Federación Hotelera de Mallorca aseguró que un 45% de los hoteleros de Mallorca no ha cobrado la ecotasa impuesta por el Gobierno autonómico para no perjudicar a sus clientes. Según las mismas fuentes, sólo el 15% de los hoteleros asociados ha cobrado el impuesto turístico a sus clientes, mientras el 40% restante recompensó a los turistas que pagaron la ecotasa con bonos de consumiciones o servicios en sus establecimientos.
Ayer se dio a conocer otro de los indicadores que dan cuenta de la desaceleración de la actividad turística mundial. El tráfico regular en rutas internacionales de las compañías europeas registró una caída del 7,1% la tercera semana de agosto.