El PIB japonés crece cinco décimas en el segundo trimestre
PIB de 2T en Japón: 0,5% (T) ; previsión : 0,2% ; anterior : 0,0% (R )
La publicación del PIB del segundo trimestre viene acompañada por una revisión histórica de la serie desde 1994 como resultado de la incorporación de nuevas estadísticas por la vertiente de al oferta (especialmente en el sector servicios) y diversos cambios metodológicos en el ajuste estacional de las series. Todo ello da lugar a un cambio en las cifras de los últimos años que, en líneas generales, muestra un mejor tono del consumo privado desde 1999, mientras, en el terreno de la FBCF, se observa que el impacto de la desaceleración mundial en 2001 ha sido mayor de lo estimado anteriormente. En todo caso, el comportamiento del consumo da lugar a que la revisión del PIB en los últimos años haya sido al alza.
La revisión más llamativa corresponde a las cifras del primer trimestre de 2002, cuyo crecimiento se estima nulo en la actualidad frente al 1,4% inicial.
Esta fuerte revisión se produce como resultado de un menor crecimiento del consumo privado, cuyo vigor había sorprendido en su día, (ahora se estima en un 0,5% frente al 1,6% inicial), así como del consumo público (0,4% frente al 1,2% estimado anteriormente), y FBCF (-1,7% frente al 1,2% original). Todo ello provoca que la demanda interna pase de aportar 0,8 p.p. al avance trimestral del PIB a drenar cinco décimas. Aunque en menor medida, la revisión también afecta al sector exterior, que reduce su contribución positiva al crecimiento trimestral (0,5 p.p. frente a los 0,7 p.p. estimados anteriormente) como resultado de un crecimiento de las exportaciones menos vigoroso (4,8% trimestral frente al 6,4% estimado anteriormente).
Centrándonos ya en el PIB del segundo trimestre, éste supera al alza las previsiones con un crecimiento trimestral de cinco décimas que permite un freno en el ritmo de caída interanual hasta el 0,9% (-3,5% anterior). El sector exterior nuevamente resulta clave en este crecimiento (aporta tres décimas al avance trimestral del PIB), con un repunte de las exportaciones que constituye un nuevo máximo (5,8% trimestral) que, en esta ocasión, se ve acompañado por unas importaciones que, después de cinco trimestres consecutivos de caídas, sorprenden con un crecimiento del 3,8%. Ello resulta representativo de una demanda interna que muestra incipientes síntomas de recuperación, al mostrar una contribución trimestral positiva al PIB por primera vez desde el primer trimestre de 2001. Unos inventarios que dejan de drenar crecimiento después de cuatro trimestres, un consumo privado que resiste pese al deteriorado entorno laboral, un mayor dinamismo del gasto público y un freno en el deterioro de la FBCF, y en particular del componente de inversión en bienes de equipo (-0,5% desde el 2,0% anterior) serían los determinantes del mayor dinamismo de la demanda interna.
En cualquier caso, la elevada dependencia que todavía muestra el crecimiento nipón de las exportaciones y el hecho de que el consumo privado haya sostenido la demanda interna en los dos últimos trimestres son factores que ponen de manifiesto la vigencia de importantes riesgos en las sostenibilidad de la incipiente recuperación iniciada en 2002. Los datos de actividad industrial comienzan a acusar síntomas de agotamiento en la recuperación de las exportaciones, mientras la precariedad del entorno laboral y las nulas perspectivas de mejoría a corto plazo no permiten confiar en que el consumo privado como soporte del gasto doméstico en próximos meses.
En esta línea se encuentran las declaraciones del Ministro de Finanzas Takenaka, que tras la publicación de esta cifra de PIB ha anunciado que el gobierno no va a revisar su estimación de crecimiento cero en el año fiscal 2002-03 y que las perspectivas para próximos meses apuntan a una lenta recuperación ensombrecida por la persistencia de riesgos, en su opinión, al alza.