Schröder habilita ayudas a las empresas por 9.800 millones
El Gobierno alemán acordó ayer con representantes de la industria y la banca, así como de los Gobiernos regionales de los Estados federados afectados por las inundaciones, un programa de ayuda inmediato para evitar que al desastre natural en el este de Alemania le siga una catástrofe económica. 'La meta de la ayuda debe ser que ninguna empresa tenga más dificultades para trabajar que las que tenía antes de las inundaciones', dijo el canciller Gerhard Schröder durante una rueda de prensa.
En términos concretos, se acordó una ayuda inicial hasta de 15.000 euros a cada empresa de la región afectada que haya sufrido daños, así como una moratoria para sus deudas con entidades crediticias.
Además, la Oficina Federal del Trabajo asumirá durante un tiempo los costos laborales de las empresas de la región para evitar que estas se vean obligadas a efectuar despidos al no poder funcionar como lo hacen habitualmente mientras se restablece la normalidad.
Inicialmente, el ministro de Economía, Werner Müller, había propuesto que a las empresas afectadas se le condonaran las deudas, pero en la reunión se acordó que esto sólo tendría lugar en casos específicos y que por regla general sólo se concedería una moratoria mientras vuelve la normalidad.
Para adoptar esa decisión se tuvo en cuenta que muchos de los institutos de crédito acreedores de las empresas afectadas están en la región y también sufrieron pérdidas con las inundaciones.
Coste total
El coste total del programa de ayudas será de 9.800 millones de euros, según anunció Hans Eichel, ministro de Finanzas alemán. De esta partida, 5.000 millones de euros corren a cargo del Gobierno federal,1.200 millones de los fondos comunitarios y los 3.600 millones restantes de los Gobiernos regionales federados y de los ayuntamientos.
El canciller alemán contempla la posibilidad de subir durante un año el impuesto de sociedades del 25% actual al 26,5% para enfrentar la financiación de la recuperación. Así lo señaló el propio Schröder, quien subrayó que con ello recogía una 'sugerencia solidaria' del presidente de la Confederación de la Industria Alemana (BDI), Michael Rogowski.
El aumento temporal del impuesto de sociedades se agregaría al aplazamiento de la segunda fase de la reforma fiscal que entrará en vigor en 2004, y no en 2003 como estaba planificado, y que reducirá el tipo impositivo máximo del 48,5% actual al 47% y el tipo mínimo, del 19% al 17%.
La oposición cristianodemócrata no bloqueará el plan en el Congreso, pero sugiriere financiar el plan con las ganancias del Bundesbank.
Los bancos anuncian créditos blandos
Los bancos y cajas de ahorros alemanes quieren ayudar a los damnificados por las inundaciones con la concesión inmediata de préstamos y créditos en condiciones favorables. Los afectados por esta catástrofe podrán obtener el dinero sin complicaciones burocráticas y recibirán en muchos bancos una moratoria en el caso de que tengan créditos pendientes. Dresdner Bank, la tercera entidad bancaria alemana, tiene reservados 600 millones de euros para estos casos, y sus clientes particulares recibirán préstamos al 3,5% (en lugar del 6%) para la reparación de edificios.
Las cajas de ahorros han destinado 1.000 millones para la reparación de daños y concederá créditos a empresas con un tipo de interés menor que el habitual. Además, los particulares podrán obtener un crédito hasta de 40.000 euros por familia en condiciones más favorables. Hypovereinsbank de Múnich doblará el crédito disponible con un interés del 5%, en vez del 11,2% que cobra ahora.