_
_
_
_
Empleo

El desvío del IPC costará unos 2.000 millones de euros en pensiones

El aumento de la inflación es, sin duda, un mal dato para todos y también para el Gobierno que, si los precios se comportan según las previsiones internas del Ejecutivo, tendrá que desembolsar la cantidad nada desdeñable de 1.980 millones de euros (324.000 millones de pesetas) para pagar la actualización y consolidación de las pensiones por el desvío del IPC.

El secretario de Estado de la Seguridad Social, Gerardo Camps, avanzó ayer que su departamento ha calculado que deberá pagar 55 millones de euros (9.000 millones de pesetas) por cada décima del IPC de noviembre -mes que fija la ley para calcular la revalorización de las pensiones- que se desvíe de la inflación prevista en el 2%.

A esto habrá que añadir otros 55 millones de euros por décima que se desvíe para pagar en 2003 la consolidación de dicha revalorización de las pensiones.

De esta forma, si se cumplen las previsiones que manejan internamente fuentes gubernamentales que fijan el IPC de noviembre en el entorno del 3,8%, el desvío de la inflación respecto al 2% previsto ascendería a 18 décimas. Teniendo en cuenta que cada décima cuesta 55 millones de euros, la revalorización de las pensiones costará 990 millones de euros y su consolidación en 2003 otros 990, con lo que el total del gasto adicional en pensiones por el repunte inflacionista ascenderá a los 1.980 millones de euros antes citados.

La Ley de Racionalización y Consolidación de Pensiones de 1997 asegura el mantenimiento del poder adquisitivo de los casi ocho millones de pensionistas. Por tanto, éstos recibirán en enero, mediante una paga única, la cantidad correspondiente a la compensación por el desvío de la inflación, que se abonará con cargo a los Presupuestos de 2002. Esta paga quedará consolidada para siempre en la nómina de las pensiones, pero el montante de esta consolidación correrá a cargo de los Presupuestos Generales del Estado de 2003.

Así, los casi 2.000 millones de euros que tendrá que abonar el Estado por este concepto supone casi el triple de lo que le costó al Gobierno el desvío de la inflación en 2001, cuando tuvo que pagar 691,16 millones de euros (115.000 millones de pesetas). El pasado ejercicio, el IPC de noviembre fue del 2,7%, con lo que el desvío de la inflación fue de sólo siete décimas frente a las 18 que podrían registrarse este año.

El superávit, asegurado

Pese a este fuerte incremento del gasto en la revalorización y consolidación de las pensiones, Camps hizo ayer hincapié en que 'en ningún momento, esto pone en peligro el superávit previsto para la Seguridad Social en 2002', que sigue siendo del 0,5% del producto interior bruto (PIB).

Por otra parte, a esta buena salud de la Seguridad Social, se contrapone un dato no tan bueno y es que España es el tercer país de la Unión Europea (UE) con los salarios más bajos, después de Portugal y Grecia, según el 'eurobarómetro social' elaborado por CC OO de Cataluña. Según este informe, el salario mínimo de España (515,9 euros) es 2,4 veces inferior al de Luxemburgo (1.259 euros); y un responsable de informática cobra en España 3.360 euros, frente a 7.245 de Dinamarca y 5.942 de Alemania.

Trabajo envía 20 millones de cartas

 

Además de mantener saneadas sus cuentas, la Seguridad Social trata de mejorar sus servicios al ciudadano. Con este objetivo, el secretario de Estado de este organismo, Gerardo Camps, presentó ayer la nueva campaña para informar a todos los trabajadores sobre sus vidas laborales y el estado de sus cotizaciones a la Seguridad Social.

 

 

 

 

 

 

 

Según esta campaña, que se inició en 2001, la Seguridad Social enviará 20 millones de cartas a todos los trabajadores afiliados al sistema, así como a los parados que hayan trabajado en los cinco años anteriores, informándoles de su vida laboral (nombre de la empresa y años en los que han estado trabajando y cotizando para ellas) así como de las cotizaciones efectuadas mes a mes a lo largo de 2001. Los trabajadores de más de 60 años recibirán las cotizaciones detalladas de los últimos 15 años, con el fin de que puedan hacerse un cálculo aproximado de su futura pensión.

 

 

 

Las cartas se enviarán entre este mes de agosto y enero y en el caso de detectar algún error en su vida laboral o en sus cotizaciones los trabajadores podrán llamar al teléfono 902 380 080 o consultar la página web www.seg-social.es.

 

 

 

En la campaña de 2001, con 14 millones de cartas (el 25% no llegó a su destino), hubo 100.000 incidencias y 325.000 llamadas telefónicas.

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Más información

Archivado En

_
_