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Crisis en Latino América

Uruguay extiende hasta el viernes el cierre bancario

El Gobierno de Uruguay decidió ayer ampliar hasta el viernes inclusive el cierre bancario aprobado el martes para frenar la retirada de depósitos que amenaza con colapsar el sistema financiero. El ministro de Economía, Alejandro Atchugarry, descartó ayer 'totalmente' la posibilidad de congelar los depósitos de los ahorradores, como hizo en diciembre Argentina, y anunció que está 'prácticamente sellado' un acuerdo por el que Uruguay recibirá el lunes una ayuda internacional de 1.500 millones de dólares (1.530 millones de euros).

A pesar del cierre de las oficinas bancarias, los uruguayos podrán acudir a los cajeros para obtener efectivo con un límite de 5.000 pesos (unos 200 euros), según informaron ayer a Efe fuentes oficiales. Las operaciones sólo podrán hacerse en pesos, que oscilan entre 25 y 28 unidades por dólar, para evitar que la moneda siga desplomándose.

El Ejecutivo justificó el nuevo periodo de suspensión de la actividad bancaria porque necesita tiempo para elaborar un plan de rescate financiero. Por otra parte, la ayuda internacional está condicionada a reformas como la creación de un fondo de fortalecimiento del sistema bancario.

Los bancos uruguayos perdieron el 33% de sus depósitos en los seis primeros meses del año. Esta situación se debe en gran parte a los ahorradores argentinos, que en lo que va de año han retirado de sus cuentas en Uruguay cerca de 5.000 millones de dólares (5.110 millones de euros), de los 7.000 millones de dólares (7.150 millones de euros) que se estima había depositados a final de 2001. Los argentinos se han visto obligados a recuperar el dinero de Uruguay ante la congelación de los depósitos impuesta por el Gobierno de Eduardo Duhalde.

La cancelación de las cuentas de ahorradores extranjeros ha puesto al borde del precipicio al Banco Central. La autoridad monetaria ha dilapidado sus reservas en divisas, que han caído el 78,8% en lo que va de año, pasando de 3.100 a 665 millones de dólares (de 3.170 a 680 millones de euros). Sólo el lunes pasado la caída fue de 70 millones de dólares (71,5 millones de euros). Las autoridades estimaron que, a ese ritmo, las reservas desaparecerían en 16 días.

Las buenas noticias están en el apoyo de EE UU y del Fondo Monetario Internacional, de los que se espera la ayuda inminente de 1.500 millones de dólares. El Fondo está dispuesto a adelantar 700 millones de dólares (715 millones de euros), mientras que EE UU aportará 800 millones de dólares (817 millones de euros). La asistencia total que los multilaterales estudian conceder a Uruguay asciende a 3.000 millones de dólares (3.070 millones de euros).

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